La Casa Museu espera poder trasladarse el próximo año al Palau Can Saura. Los herederos de José Roberto Torrent han mantenido una reunión con el alcalde de Ciutadella, José María de Sintas. El Consistorio se presta a ceder una o dos salas a la familia con el fin de reubicar la colección del pintor que hasta la fecha se podía ver en el edificio de la calle Sant Rafel.
Otra víctima de la crisis
La exposición permanente que puede visitarse entre mayo y octubre, cerró sus puertas el pasado mes con el agravante de que ha agotado todas sus reservas. "Para que siga abierta todos los hermanos hemos tenido que poner dinero", se lamenta Rafel Torrent quien alude a la ausencia de ayudas, en la recién acabada temporada, por parte del Consell y del Ayuntamiento. "Antes recibíamos por ambas partes, pero la falta de subvenciones nos ha afectado", matiza. En este sentido, recalca que la última apertura de la Casa Museu, lejos de ser rentable, ha implicado a la familia un desembolso de 6.000 euros.Los Torrent se muestran optimistas con la idea de poder abrir en 2012 en las instalaciones de Can Saura. "El alcalde y la concejala de Cultura, Auxiliadora Pons, se han mostrado muy receptivos al respecto. Tenemos la palabra de José María de Sintas", añade.
De ser viable dicha reubicación, la familia recortaría costes en infraestructura como el gasto de alquiler que deposita por el edificio de la calle Sant Rafel y del que ya han anunciado su marcha. Además de ahorrarse pagos importantes en el tema "de los seguros y de la vigilancia". La Casa Museu del Pintor Torrent pasa a engrosar la lista de espacios culturales que han sido víctimas de la crisis.