La pianista menorquina Isabel Fèlix (Maó, 1971) lleva una década investigando la vida y obra de uno de los nombres más importantes de la música de Menorca, el de la compositora Margarida Orfila i Tudurí (Maó, 1889, Barcelona, 1970). Un camino que inició con la documentación del trabajo para su máster en Musicología y Educación Musical, centrado en la faceta pianística de la artista, y con el que todavía sigue adelante embarcada ahora en un doctorado que abarca la carrera de Orfila desde una perspectiva más amplia.
Proceso que ha servido para cumplir uno de los grandes retos que se había marcado Fèlix y que se acaba de materializar en la edición de álbum en el que se recoge la integral de la obra pianística Orfila. Un disco que recopila 17 cortes y que se extiende durante algo más de 80 minutos, trabajo que ha sido editado en formato físico por la discográfica Columna Música y del que también se puede disfrutar en diferentes plataformas digitales, como Spotify, y adquirir a través del portal musitekton.es.
Confiesa Isabel Fèlix que el resultado le produce «especial ilusión» porque representa «rescatar del olvido y reivindicar la figura» de una compositora que le cautivó desde que tuvo conocimiento de su obra. Un álbum que adquiere un valor especial si se tiene en cuenta que existen muy pocas referencias en formato físico de las composiciones de la pianista nacida a finales del siglo XIX.
Sí se puede disfrutar de su estilo romántico en referencias como los álbumes recopilatorios «Compositores catalanes, generació noucentista» o «Barcelona Belle Epoque», proyecto este último del que también fue partícipe Fèlix. Pero relata esta última que gran parte de la música de Orfila no se publicó en su día, y la que sí lo hizo quedó en el olvido una vez descatalogada. «La mayor parte del material está sin editar», reconoce la pianista mahonesa, quien se ha propuesto seguir trabajando de cara propiciar que el eco de la compositora siga vivo con la grabación de nuevos trabajos en el futuro.
Algo que sería imposible de llevar a cabo sin un profundo trabajo de investigación y documentación, labor que se ha visto recompensada en los últimos tiempos con hallazgos como el del pasado verano, cuando salieron a la luz un buen número de partituras en el piso del Eixample de Barcelona donde vivió Orfila durante gran parte de su vida. Un material gracias al cual puede ver ahora la luz la integral de su obra pianística.
Isabel Fèlix siempre se ha sentido muy atraída por la figura artística de Orfila, ambas naturales de Maó y con trayectoria profesional en la Ciudad Condal. «Su trabajo me interesó mucho desde el principio, y con la calidad que tenía creo que era un deber recuperarlo... La verdad es que están saliendo cosas muy interesantes», defiende la pianista, quien no obvia que el hecho de tratarse de una mujer implicaba de alguna forma «un deber» para visibilizar su figura.
La de una artista que, a pesar de que la Historia de la Música se ha construido mayoritariamente con nombres masculinos, sí que logró tener cierta relevancia durante el desarrollo de su carrera, como así lo atestiguan numerosas referencias en la prensa de la época. Una popularidad que, no obstante, comenzó a menguar con su jubilación y sus posterior desaparición. «Si no se hace un trabajo de recuperación podría quedar en el olvido para siempre», concluye Fèlix.
Maó, la primera opción para la presentación del disco este verano
El plan inicial era que la edición del disco, cuyo lanzamiento coincide con el 50 aniversario de la muerte de Margarida Orfila, se presentara con un concierto en el Palau de la Música Catalana, donde además se grabó el álbum a finales de agosto del año pasado. Sin embargo, la incertidumbre generada por la crisis sanitaria de la covid-19 ha trastocado los planes. Según avanza Fèlix, la intención es que tenga lugar en Maó, concretamente en el escenario del Teatre Principal una vez que este espacio retome su programación. La idea es que la presentación pueda tener lugar en agosto o septiembre.