El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ciutadella estudia adquirir parte del equipamiento de las salas de cine del Canal Salat y permitir a la entidad Juventudes Musicales organizar proyecciones como cine club.
El consistorio y Juventudes Musicales analizan las fórmulas que hagan viable la utilidad de las instalaciones, a través de un nuevo contrato de explotación de la actividad, ha remarcado la institución este miércoles en un comunicado.
El objetivo es recuperar el cine para el municipio, una vez rescindido el acuerdo con la empresa que ha gestionado el Canal Salat durante los últimos 9 años.
La anterior propiedad decidió abandonar la actividad cinematográfica a causa de las consecuencias económicas derivadas de la pandemia.
La Isla continua sin salas de cine abiertas, porque los Ocimax de Maó permanecen cerrados dada la inviabilidad económica del negocio. Solamente el Cine Club Ateneo ofrece sesiones en el Teatro Principal de Maó.
Como cualquier negocio se mide por ingresos y gastos, por mucho empeño que se ponga si la gente deja de ir al cine no hay viabilidad posible. El problema del cine es el mismo que el resto de la cultura y el ocio, los gustos cambian y las alternativas de ocio son mayores, sumado a las plataformas digitales. La caída en desgracia del cine es un problema generalizado en todas las ciudades que tiene muy difícil solución.