Joan Pons Torres, la gran novedad y una de las apuestas de Dolfo Vilafranca en la candidatura del PP al Consell, declara no ser «anti nada, sino más menorquinista que los que falsamente se autodenominan así, me opongo de manera clara y contundente al catalanismo de Més. Mis artículos están escritos en menorquín, defiendo esta alternativa, pero no soy ni quiero parecer un hooligan anticatalanista», señala.
Pons Torres (Ciutadella, 1993) aparece por primera vez en una lista electoral. Su única militancia es, hace años, la de Nuevas Generaciones del PP, donde coincidió con Marga Prohens, la candidata del PP a la Presidencia del Govern. Desmiente discrepancias, «ella también ha defendido en reiteradas ocasiones las modalidades insulares y tampoco cuestiona la unidad de la lengua, defendemos el Estatut, el problema es que la izquierda no aplica el artículo 35 sobre el fomento de las modalidades insulares. Tenemos claro que la riqueza de una lengua es su diversidad», añade.
Argumenta que en esa línea ha trabajado los últimos ocho años al frente de Sa Fundació, desde donde ha organizado el premio literario Joan Benejam y ha editado «Sa llengua de Menorca», un libro que va por la tercera edición y del que se han vendido 1.300 ejemplares.
Abierto a los pactos con Vox
Pudo ser candidato de Ciudadanos y tiene amigos en Vox, pero hasta ahora no había aceptado el reto de entrar en política en un espacio en el que se siente identificado y en el que entiende los pactos sin escrúpulos, «si ese es el mandato del electorado», explica.
Profesor de geografía e historial en el instituto Pasqual Calbó, está llamado a ser conseller de Cultura en un hipotético gobierno popular, «pero manda Dolfo, lo que toca ahora es salir a ganar», afirma. «En el Consell hay que poner orden en el despilfarro y administrar con eficiencia y rigor hasta el último céntimo».