La demarcación de Menorca del Colegio de Arquitectos de Balears (COAIB) ha iniciado negociaciones con los ayuntamientos y el Consell con el objetivo de proponer la firma de convenios de colaboración que establezcan la mediación del colectivo para la adjudicación de proyectos promovidos desde las administraciones de la Isla.
Los arquitectos sugieren que tanto las instituciones locales como la insular presenten los proyectos al COAIB, quien se encargaría de convocar una bolsa de trabajo entre todos los asociados y escoger mediante un sorteo a los arquitectos que pueden optar a llevar a cabo la obra. "Los colegiados escogidos presentarán su idea a la administración correspondiente y ésta podrá elegir la propuesta que se adapte más a sus necesidades", explicó ayer el presidente de la demarcación menorquina del colectivo, Miguel Sintes, quien señaló la necesidad de que los proyectos se adjudiquen valorando la calidad arquitectónica de la propuesta, por encima de los honorarios. AgilidadAsimismo, Sintes recalcó que "el COAIB puede suponer una herramienta ágil y políticamente transparente" y añadió que este sistema conllevaría también un reparto equitativo de los proyectos entre el colectivo de arquitectos de la Isla en un momento de crisis económica en que algunos despachos de arquitectos pasan por dificultades. No obstante el presidente apuntó que la voluntad de los arquitectos es que estos acuerdos se puedan prolongar en el tiempo y no se limiten a circunstancias excepcionales motivadas por la situación económica. "Deberían aplicarse siempre los conceptos de transparencia y de reparto", puntualizó.
Sintes reconoció que todavía no han recibido ninguna respuesta oficial por parte de las instituciones de la Isla aunque apuntó que la mayoría se han mostrado receptivas a la propuesta. Por su parte, el tesorero de la demarcación de Menorca del COAIB, Rafael García, hizo hincapié en el acuerdo firmado recientemente entre el colectivo y el IBAVI, a través del cual cincuenta arquitectos de la Isla han tenido la oportunidad de presentarse a unos proyectos que se llevarán a cabo en cinco solares, tres en Maó y dos en Sant Lluís. "Estos dos meses han sido muy ilusionantes para los arquitectos y, además, el organismo ha podido escoger entre las ideas de cada uno de ellos", aseguró.
Critica por la demora de la aprobación del PGOU de Maó
"Estamos navegando entre dos aguas". Con estas palabras definió la situación que se vive actualmente en Maó el tesorero de la demarcación de Menorca del COAIB, quien aseguró que el hecho de que se esté aplicando al mismo tiempo el PGOU de 1987 y el que se tramita en estos momentos provoca "más retrasos, menos proyectos y, en definitiva, menos trabajo". En este sentido, el colectivo reclamó a la administración más agilidad y más seguridad jurídica. Los arquitectos se mostraron contrarios a la decisión tomada por el Ayuntamiento de Maó de acogerse al Decreto 5/2009, que permite ampliar el plazo de la suspensión de licencias. "Cualquier retraso nos perjudicará porque en el último año hemos llevado a cabo anteproyectos basados en el nuevo PGOU y, si no se aprueba pronto, habremos perdido todo este tiempo de trabajo", apuntó Sintes. Asimismo señalaron que la aplicación de las dos normativas da lugar en ocasiones a contradicciones, lo provoca la paralización de proyectos.
Retrasos en la concesión de licencias de obras
Los arquitectos de la Isla criticaron también el retraso en la concesión de licencias de obra por parte de los ayuntamientos de la Isla, un problema especialmente notable en Maó y Es Mercadal, situaciones que dan lugar a importantes demoras en la actividad edificatoria. "El Ayuntamiento de Maó puede tardar alrededor de seis o siete meses para conceder una licencia", denunció Sintes, quien apuntó que "ahora que hay poco trabajo no hay excusas para que las autorizaciones se retrasen más allá de los tres meses, el límite que establece la Ley". En este sentido, el colectivo auguró que el 2010 "será tan malo o más que el 2009 en relación al número de proyectos nuevos" si no se toman medidas para agilizar los trámites. Según apuntaron, la mayoría de los arquitectos de la Isla se dedican hoy por hoy al sector de la reforma y la rehabilitación, que reclama rapidez y agilidad. "No estamos hablando de grandes obras sino de una persona que quiere arreglar un baño y debe pasar por un calvario para conseguirlo. Eso si no se hecha para atrás", recalcó García, quien puntualizó que "la obra de reforma no conlleva una complejidad urbanística por lo que es absurdo que sea necesario pasar tantos filtros antes de poder actuar"."Sabemos que la administración no nos va a resolver el problema pero les pedimos que, al menos, no sean un obstáculo a la hora de que una obra pueda salir al mercado lo antes posible", apuntó el tesorero de la demarcación menorquina del COAIB. García destacó que la lentitud a la hora de otorgar permisos de obra supone que tanto los constructores como el resto de pequeños empresarios que intervienen en una reforma "se vean obligados a estar pendientes de la concesión para poder llevar a cabo el único trabajo que, probablemente, tienen en los próximos meses".
En este sentido el asesor jurídico del COAIB, Carlos Íñigo, apuntó que "a la situación crisis se suma la desmoralización de los arquitectos y de los promotores". Por su parte, Sintes, señaló que "muchos dirán que sólo nos quejamos cuando hay crisis pero precisamente éstas han de servir para recapitular, reorganizar y valorar la situación".
Comisión
Asimismo, el colectivo calificó de "insostenible" los retrasos que acumula la Comisión Balear de Medio Ambiente, un organismo que debe supervisar todos los proyectos de Balears. "Cualquier documento urbanístico de cualquier ayuntamiento de las Islas debe de ser revisado por la Comisión, lo que da lugar a demoras de hasta medio año", manifestó Sintes, quien apuntó que "no estamos en contra de esta comisión, pero le exigimos más agilidad".