El Ayuntamiento de Maó ha aprobado la construcción de un canal subterráneo por el que se hará pasar el agua potable desde el pozo de Torelló hasta Sant Climent.
El proyecto, con un coste de 300.000 euros que se financiará a través del Plan E 2010, permitirá dar respuesta a una de las demandas que más tiempo ha perseguido la población de Sant Climent.
Vicenç Tur, alcalde de Maó, se mostraba ayer satisfecho al hacer el anuncio de esta obra: "desde hace siete años estamos trasladando el agua en camiones cisterna para que llegue en condiciones a Sant Climent". La construcción, permitirá, según comentaba el primer edil, "mejorar la calidad, al mismo tiempo que se reducirán costes".
Adelaida Pons, presidenta de la asociación de vecinos del pueblo, aseguró ayer que, a pesar de valorar mucho esta medida, no se conforman con esto: "Lo que hay que arreglar aquí es la depuradora, para que deje de volcar nitratos y no tengamos que mezclarla con agua de fuera".
También relacionado con el tema del agua, se habló ayer de la depuradora de Binidalí. Si bien esta planta compete a la Conselleria de Medi Ambient, el Consistorio pide desde hace tiempo que se haga algo para que entre en funcionamiento y se conecte hasta Canutells.
La canalización del agua potable es una de las acciones que el Ayuntamiento de Maó completará con otras intervenciones en núcleos urbanos destinadas a mejorar la vida de los ciudadanos más que a grandes obras.
Se planean, por ejemplo, obras de mejora para la pacificación del tráfico en Sant Climent, así como una serie de mejoras en la salida de carretera hacia Binidalí.