El delegado del Gobierno central en Balears, Ramon Socias, aseguró ayer que la nueva Comisaría de Policía de Maó se construirá con una coyuntura económica más favorable. Socias reconoció que la crisis económica ha frenado el inicio de las obras de construcción de la Comisaría de la ciudad, en el transcurso del acto de presentación del nuevo comisario, el inspector jefe Fernando León Vivó. También asistieron el jefe superior de Policía de Balears, Bartolomé Campaner, el anterior comisario de la Policía de Maó, Amador de la Peña, el alcalde Vicenç Tur, y otras autoridades políticas y militares. Socias disculpó la no asistencia del director insular de la Administración General del Estado, Javier Tejero, debido a su asistencia a un curso de alto directivo.
El jefe superior de Policía de Balears, Bartolomé Campaner, fue el primero en el turno de intervenciones y señaló que el relevo en la jefatura del Cuerpo Nacional de Policía de Maó debía favorecer la continuidad y estabilidad de la Comisaría de la ciudad. Campaner expresó sus deseos de que la nueva etapa profesional del comisario de Maó esté plagada de éxitos y, por otra parte, apostó para que en la nueva etapa se lleve a cabo la construcción de las nuevas dependencias policiales de la ciudad.
El delegado del Gobierno central, Ramon Socias, destacó la importancia de la incorporación de Fernando León Vivó en la jefatura de la Policía Nacional de Maó, puesto que durante siete años estuvo destinado en esta ciudad. Además, subrayó su condición de menorquín, nacido en Ciutadella, para avalar su conocimiento de la realidad insular y del cuerpo policial. En este sentido, señaló la presencia de otros agentes menorquines tanto en la Policía Nacional como en la Guardia Civil.
Socias aseguró que el anterior jefe de la Comisaría de Maó, Amador de la Peña, había dejado el listón muy alto en su gestión profesional y, por otra parte, animó a proseguir en la línea de los últimos años, que se han caracterizado por los buenos resultados. En este sentido, aseguró que el índice de delincuencia desde 2004 en Balears había experimentado una disminución de 24 puntos y apostó por una Policía moderna y cercana a los ciudadanos.
El delegado del Gobierno central reconoció que la construcción de la nueva Comisaría de Maó era una de las infraestructuras pendientes y emplazó la ejecución del proyecto a un futuro inmediato caracterizado por una coyuntura económica más favorable. Socias recordó que el Ayuntamiento de Maó había cedido un solar para la construcción de las dependencias policiales, aunque la falta de partida presupuestaria para afrontar el proyecto ha retrasado el inicio de las obras.