El presidente de la patronal hotelera de Menorca, Joan Melis, declaró ayer que la nube de cenizas generada por la erupción del volcán islandés esta condicionando cada vez más las reservas para esta temporada.
La incertidumbre se ha instalado entre quienes comienzan a planificar sus vacaciones, algunos demoran su viaje en espera de cambios y otros dudan ante una posible cancelación del vuelo de regreso a su lugar de origen y la probabilidad de quedarse tirado en un Aeropuerto.
"El interrogante que se plantea a muchos viajeros no es tanto la salida, sino si podrán llegar a tiempo para incorporarse a su lugar de trabajo", explica Melis. Al respecto, el presidente de la patronal hotelera cuenta que tras el caos aeroportuario originado por la erupción del volcán, las reservas han sufrido una ligera ralentización en el mercado británico e incluso en el alemán, precisamente en un momento en el que el ritmo de contratación en ambos mercados emisores era más animado que el año pasado por estas mismas fechas.
De momento, las cancelaciones por este mismo motivo no parecen muy significativas hasta la fecha. No obstante, la patronal ha solicitado a sus asociados información sobre esta circunstancia. Melis cifra entre un 5 y un 10 por ciento el porcentaje de anulaciones de reserva, pero aún debe confirmarse el dato. De momento, la cifra que ya se conoce son los 600.000 euros de pérdidas acumulados por el sector hotelero menorquín el pasado mes de abril durante los cinco días en los que Eurocontrol cerró buena parte del espacio aéreo europeo por culpa de las cenizas del volcán.
Este hecho motivó que las patronales de Balears solicitaran hace unos días una revisión de los protocolos de actuación de Eurocontrol. "Será importante averiguar cómo llega la información al viajero para que no tenga tantas dudas", reflexionó Joan Melis.