El armador del velero "Sir Robert Baden Powell", Karsten Börner, se siente indefenso ante la situación que está viviendo. Por segundo año consecutivo no podrá amarrar su buque-escuela fletado para turistas en el puerto de Ciutadella, una de las escalas con más reclamo entre las que ofrece su empresa. En noviembre de 2008, como cada temporada, solicitó el permiso pertinente a Ports de les Illes Balears para operar en la rada de Ciutadella. La institución portuaria, según relata el capitán del velero, ni siquiera se molestó en contestar a la petición en esta ocasión.
A finales del pasado año, Börner decidió insistir ante la ausencia de noticias por parte de Ports. En esta ocasión, desde Palma se le requirió que completara la documentación pertinente, para después denegar el permiso de forma definitiva el pasado mes de abril. En el informe se hacía referencia a que dado "el carácter comercial" del puerto "y el riesgo de 'rissagues'" como norma general no se permite a atracar y pernoctar en el muelle comercial.
"Injusticia"
El armador considera la decisión "totalmente injusta" y recuerda que a otros barcos en tránsito sí se les permite entrar en la rada. Según denuncia, incluso se les ha denegado en ocasiones el permiso para entrar a repostar agua. De hecho, en temporadas pasadas sí se permitió al "Sir Robert Baden Powell" entrar en el muelle tras la salida del último ferry y abandonarlo a primera hora de la mañana para no interferir en el tráfico marítimo.
Pero los problemas del velero, que en cambio sí tiene permiso para operar en Maó, que depende de Autoridad Portuaria de Balears, no se reducen sólo a Ciutadella. Börner explica que Ports tampoco le da permiso para amarrar en Cala Ratjada, alegando en este caso falta de espacio, una excusa que según el armador tampoco se ajusta a la realidad.
Börner, que trabaja en Balears desde hace 17 años y ofrece servicios turísticos con el velero desde 1999, está estudiando con sus abogados qué medidas legales puede adoptar, aunque según recuerdan desde la empresa consignataria que tramita sus licencias los plazos no permitirán solucionar el problema este verano.
Pérdidas económicas
En ese sentido, Börner explica que la decisión de Ports está "perjudicando económicamente" a su empresa, y añade por otra parte que la decisión afecta también a Ciutadella y sus negocios turísticos. El armador recalca que la ciudad de poniente es "un gran atractivo" para gente que se embarca en la ruta "por ser de gran interés turístico y cultural".
En las alegaciones enviadas por la empresa consignataria a Ports se recalca que gracias a los sistemas de predicción de "rissagues" el buque, que según recuerda comenzó a hacer escalas en Ciutadella hace años, abandonaría el puerto. En el mismo documento se hace referencia a que a la parte afectada por la decisión de Ports le consta "que las pernoctaciones sí son permitidas en el muelle comercial para las embarcaciones de tránsito". Por otra parte, se ofrecen a flexibilizar sus horarios según las necesidades del puerto para poder operar.