Los propietarios de los yates que fondean en Cala Teulera y la dirección de Autoridad Portuaria (AP) en Menorca alcanzaron ayer un acuerdo por el que la entidad gestora será flexible al aplicar la nueva normativa que restringe los fondeos, siempre y cuando los navegantes respeten la señalización, se identifiquen y cooperen en el cumplimiento de una reglas básicas en la zona.
El portavoz del colectivo de propietarios de barcos, Marius Grossheim, aseguró que, tras un encuentro celebrado ayer con el responsable de AP en la Isla, Jesús Fernández-Reyes, la situación se ha encauzado y la actual normativa se aplicará "con benevolencia" por parte del organismo responsable del puerto de Maó. Las condiciones para los dueños de embarcaciones son que declaren su llegada a la zona, con la aportación de la documentación del yate y de los pasaportes de la tripulación; que se respeten las boyas que señalizan el canal de paso de embarcaciones como los catamaranes que pasean turistas por el puerto, para evitar el riesgo de accidentes; y que se tenga en cuenta que Cala Teulera tiene una capacidad máxima que ronda los treinta barcos. En los momentos de congestión Autoridad Portuaria no permitirá que los yates se trasladen y fondeen indiscriminadamente en otros puntos de la rada.
La normativa vigente desde el 1 de julio regula los fondeos de emergencia y los limita a un máximo de tres días, según las condiciones meteorológicas o si se dan causas de urgencias médicas o de avería mecánica. Consciente de la legalidad, el representante del colectivo, Marius Grossheim, se mostró satisfecho por la buena disposición mostrada por los responsables de Autoridad Portuaria y subrayó que la mayoría de los navegantes que fondean en la zona respetan las normas y cooperan entre ellos, pese a la existencia de excepciones cuando llegan barcos de paso.