Si hubo un artículo triunfador durante la jornada de ayer, ése fue sin duda el poncho. Es la palabra que más se escuchaba por las calles de Maó, y es que así es como llaman los turistas al simple chubasquero de plástico que se puede apreciar en las fotos. Los comerciantes aprovecharon la mañana lluviosa para atender a la avalancha de visitantes que, al no poder ir a la playa, destinaron unas horas a visitar las poblaciones menorquinas y realizar algunas compras. Datos curiosos: por un lado, que muchos comerciantes reconozcan la escasa oferta complementaria; por otro, que los turistas lo sepan y cuenten con que deberán volver al hotel. Y un último apunte: a las 13 horas había algún comercio cerrando... cuando las calles seguían llenas.
Los chubasqueros de colores inundan las calles de la Isla
Las primeras precipitaciones de agosto no se han hecho esperar y ayer los turistas acudieron a las poblaciones para pasear y ver diferentes comercios
ELENA DELGADO | Maó |