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Arturo Sintes Lluch, Maó, año 1951. Casado, 2 hijos, 2 nietos. Industrial, Presidente de la Federación Balear de Ciclismo

"El coraje de las ‘generaciones perdidas' fue un grito de rebeldía para salir de la nada y aspirar a todo"

"En situaciones como la recientemente vivida con el accidente del día 1, no reaccionas, el golpe es tan brutal que te anonada, quedas roto y sin capacidad para actuar coherentemente"

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La entrevista de hoy estaba programada, faltaba concretar la fecha pero el mortal accidente acaecido el día 1 de este mismo mes, en que dos ciclistas menorquines perdieron la vida arrollados por un coche, hizo que cobrara actualidad y se antepusiera a otras ya apalabradas.

Arturo Sintes Lluch conoce el mundo del ciclismo como pocos e incluso ha vivido situaciones similares a la de hace unas pocas semanas, y fue, como miembro de la Agrupación Ciclista de Menorca, uno de los firmantes del manifiesto presentado al delegado del Gobierno tras el mortal accidente de Juan Antonio Lluch que, en junio de 1993 fue arrollado por un coche; pero además, en Arturo Sintes convergen otras condiciones y cualidades, su coraje, su inconformismo, su voluntad de "crecer" y aportar a la sociedad parte de cuanto quería realizar; también su capacidad de trabajo y de entrega son dos factores destacables en este "incombustible" deportista.

En "Sa Graduada", debiste iniciar tus estudios, ya que naciste en Camí de ses Vinyes, ¿cierto?
Sí, ambas cosas lo son; el lugar de mi nacimiento es correcto y en el Colegio Primo de Rivera cubrí toda la etapa escolar y al salir de allí comencé a trabajar.

Con apenas 14 años de edad y lo hiciste en la Pastelería Colón.
También es cierto aunque empecé a trabajar como aprendiz de pastelero bastante antes, puesto que mi rodaje empezó con anterioridad, en los veranos; luego cambié de oficio y trabajé de albañil en la empresa de Pedro Vinent.

Alternando trabajo y estudios.
Efectivamente; a los 17 años me reenganché a los estudios, quería aprender más y me matriculé en la Escuela de Maestría Industrial, en el nocturno, luego empecé a estudiar inglés, idioma que consideré imprescindible de cara al futuro.

Pero pronto te lanzaste a "mar abierto".
Quise progresar y a los 24 años empecé a trabajar por mi cuenta siendo éste el primer eslabón de cadena que luego se convertiría en Piscinas Menorca, empresa inicialmente ubicada en la calle Sant Jordi.

Sin embargo, para ti, tu formación seguía siendo fundamental.
Lo era y para ampliarla hice un curso de Dirección de Empresa (PDG) en IESE de Barcelona.

Paralelamente a todo lo apuntado el ciclismo era para ti algo más que una afición, ¿lo heredaste de tu padre?
Posiblemente; él, en los años 50, tenía un taller de reparaciones de bicicletas y a mí me atraía enormemente ver como acudían al taller algunos soldados enfundados con sus vestimentas de corredores ciclistas, aquellos jerseys me obsesionaban; luego y al trasladarnos a vivir a Trepucó cada día iba al colegio en bicicleta, todavía hoy doña Maruja Cerezo se acuerda de mí de cuando acudía a clase en bici.

¿Cuándo diste el siguiente paso en esta actividad deportiva?
Sobre los 15 años en que ya pude costearme la compra de una bicicleta "com cal", porque al ciclismo lo llevaba dentro desde que en el "TBO" me "empapé" de la vida y de las hazañas de los grandes corredores del momento, Fausto Coppi, Gino Bartali y otros muchos que eran los protagonistas del Tour de Francia, o del Giro italiano.

Tendrás infinidad de recuerdos.
Y que lo digas; recuerdo la época de Yurca y la de toda una serie de corredores ciutadellencs, o la de Eddy Merckx y Jacques Anquetil y no digamos la de los ciclistas mallorquines como Karmany o los Timoner. Las anécdotas de todo tipo son muchas, en cierta ocasión y con motivo de la Vuelta a Menorca, mi padre se presentó a casa con un puñado de pastillas de azúcar y me dijo: "Son para los corredores", estuve mirando aquellas pastillas de azúcar como si fuese algo "sobrenatural"; cosas de chaval.

Sobre la bicicleta, en plan competitivo, ¿obtuviste muchos títulos?
Algunos, tanto de cadete como de juvenil; obtuve el Campeonato de Menorca por puntuación y en el 69 me quedé un tanto frustrado -con la miel en los labios- al no ganar el Campeonato de Balears; en Mallorca, en Santa Maria, quedé segundo al ser superado en el sprint final; una lástima pero el ciclismo es así.

En el mundo del ciclismo lo has sido todo, o casi todo, incluso sigues en "activo". ¿Ejerce sobre ti la misma atracción que un imán?
Posiblemente porque de una forma u otra desde el año 60 he estado ligado a esta realidad; mi vinculación a la Peña Ciclista Mahonesa que fundaron mi padre y Pedro Pons Vives ha sido constante; fui delegado en Menorca de la Federación Balear con Andreu Oliver y Joan Serra y actualmente soy el presidente de dicha Federación.

También estuviste en otros menesteres.
Lo estuve, durante cinco años fui presidente del Aeroclub, temporada esta en la que por razones obvias me desligué del ciclismo; además hay otra incursión, lo diré así, en esta ocasión en el mundo del fútbol, ya que fui presidente del equipo, Menorca/At. Mahonés, de Primera División juvenil.

¿Cuándo accediste a tu actual cargo?
En junio del 2007 fui elegido presidente de la Federación de Ciclismo de Balears y a su vez presidente de la Comisión Nacional de ciclismo en pista de la Federación Española de Ciclismo.

Lo que te ha "obligado" a estar presente en…
Dos mundiales de ciclismo en pista, en Manchester en el 2008 y en Dinamarca del 2010; además y dado que actúo como delegado de equipo estuve en Italia en el Campeonato Europeo Junior, también soy el actual coordinador de la Copa de España de ciclismo en pista.

Cuando te comunicaron, cuando te enteraste del mortal accidente en que dos ciclistas menorquines, dos amigos tuyos, perdieron la vida, ¿qué sentiste?
Quedé anonadado, roto, sin capacidad de reacción, luego, al recuperarme me trasladé al hospital, al Mateu Orfila, y empecé con las formalidades protocolarias; me puse en contacto con la Guardia Civil para recabar todos los detalles y con las autoridades locales… para mí es tremendamente doloroso que en cuestión de segundos dos personas, dos seres humanos, dos amigos, pierdan la vida; además éste luctuoso suceso, que me llenó de amargura y de dolor, me recordó el mortal accidente de Juan Antonio Lluch, ocurrido en junio del 93, en condiciones muy similares a las del pasado día 1.

¿Qué medidas habría que adoptar?
En el 93, a través de la Agrupación Ciclista de Menorca, presentamos un escrito al delegado del Gobierno en el que pedíamos cuatro actuaciones, vigilancia máxima y urgente especialmente los fines de semana, adecuar convenientemente los arcenes de la carretera general, asfaltado y mejora de las carreteras secundarias y llevar a cabo una campaña de sensibilización dirigida a los conductores de coches y motos… pero los accidentes se siguen produciendo por lo que la vigilancia y la sensibilización deberían ser extremas.

¿La carretera general es el "punto negro" de nuestra red vial?
Lo es, pero no todos comprenden el peligro que entraña; particularmente aconsejo que se olviden de ella, que practiquen el ciclismo por las carreteras secundarias, que las hay y en muy buen estado, incluso digo que transitar por ellas es más relajante y bonito… por la general el ruido de los coches al pasar por tu lado es constante y desagradable, pero cada uno es libre de elegir por donde ir y practicar su deporte favorito.

El cicloturismo ha tomado carta de naturaleza, ¿lo consideras una de las alternativas rentables para nuestra promoción turística?
Claro que sí, lo es y puede ampliarse más; ten en cuenta que el cicloturismo, modalidad que actualmente practico, es muy adecuado en cualquier edad pero sobre todo lo es en el momento en que debes olvidarte de practicar el ciclismo competitivo y todavía te ves en condiciones de "hacer deporte" a un cierto nivel.

Tú has estado en varios eventos importantes, ¿cierto?
Del todo, participé en la primera Vuelta a España en que, en una semana, recorrimos 700 kilómetros con salida en Gijón y llegada a Colmenar Viejo; he estado en dos campeonatos de España por etapas y en ambos obtuve muy buenas puntuaciones y en el año 2000 participé en la Roma-Milán; como ves sigo pedaleando pero a otro ritmo.

Dicha modalidad es, ¿física y mentalmente rentable?
Del todo; desde el momento que asumes que puedes seguir practicando tu deporte favorito, tocas el cielo sobre todo cuando participas en pruebas junto a los que han sido tus ídolos, los grandes corredores ya retirados pero todavía jóvenes y que se han apuntado a esta modalidad.

Y en Menorca, ¿va a más?
Sí, con un aumento considerable de participantes; la primera Vuelta a Menorca significó el pistoletazo de salida que se consolidó con la Vuelta a los Faros, lo cual ha significado un resurgimiento del ciclismo en la Isla, de cuyo auge señalaré sólo un dato, en Ciutadella y en la modalidad de mountain bike hay más de 500 participantes, pero no de nombre, sino asiduos, de los que practican de verdad.

Entraremos en otra cuestión. ¿Qué te llevó a sumergirte en el mundo de las piscinas?
En 1975 me quedé sin trabajo y acudí a mi amigo Juan Torres, de Bonin Sansó, para pedirle me echara una mano y me encargó la construcción de una piscina que construí con el método o sistema tradicional y fue entonces cuando se me encendió "sa llumeta"; estudié el asunto en profundidad porque yo de piscinas la única que conocía era la de S'Algar y fui ampliando mis conocimientos descubriendo todas sus peculiaridades hasta que en 1977, y con ayudas familiares, compré la primera maquinaria dedicada a proyectar hormigón; el siguiente paso fue aprender a utilizarla y lo demás vino rodado.

La crisis, más virulenta de lo esperado. ¿Repercute en tu ámbito laboral?
En los 35 años que llevo al frente de la empresa y habiendo superado las crisis del 92 y del 93, que fueron muy duras, he de decirte que como la actual ninguna; mi campo de acción está muy ligado a la construcción de chalés y piscinas e incide muy directamente en el sector anglosajón, todo el relacionado con los visitantes/residentes ingleses, y la realidad es que el trabajo escasea hasta el extremo de que actualmente me dedico a la restauración de casas antiguas, trabajo que me llena y me gusta por lo que significa en sí y porque su recuperación y adecuación se convierte en un trabajo artesanal y al mismo tiempo "creativo".

¿Crees en el deporte como fuente de formación?
Por completo; desde la Federación -la de ciclismo de Balears- lo que fomentamos de una forma muy especial es el deporte de base; particularmente creo que la juventud debe practicar algún deporte, a mí me seduce el ciclismo pero hay cantidad de modalidades deportivas para elegir y muy positivas para los jóvenes.

Por las razones que sean, el ciclismo, en sus diversas modalidades, va ganando adeptos. ¿Es una realidad o un simple espejismo?
Una realidad; no puedes imaginarte la gente que lo practica, lógicamente en sus diversas modalidades muchas de ellas no competitivas y su práctica les reporta importantes beneficios; además le auguro un espléndido futuro porque su práctica, no a niveles competitivos, es adecuada para todas las edades.

Con 3.908.578 de parados las "alegrías" son pocas, escasean. ¿Eres partidario de las subvenciones?
De lo que no soy partidario, como presidente de una Federación, es que se subvencione a sociedades deportivas "profesionales" en donde se manejan millones; bajo mi punto de vista las subvenciones deberían darse a las federaciones y al deporte de base; nuestra federación, con unas 2.000 licencias tiene serios problemas a la hora de abonar gastos, debidamente conformados, de un montante de unos 25.000 euros, mientras compruebas que se conceden ayudas millonarias a dichas sociedades.

Hoy el objetivo es vivir lo mejor posible, sin apenas dar golpe, en cambio hubo un tiempo en que el esfuerzo personal era incuestionable, ¿en que hemos fallado?
No sé en lo que hemos fallado pero he de decirte que el coraje de las llamadas "generaciones perdidas" fue como un grito de rebeldía porque queríamos salir de la nada y aspirábamos a todo, a un futuro mejor.

Y salimos a flote.
Porque todo estaba por hacer y existía un inconformismo latente, una esperanza creciente y una gran voluntad de superación; la fuerza de antaño, que tenía algo de orgullo, deberíamos trasladarla a la realidad actual, a este hoy muy preocupante.

Tú también conoces este hábitat, el Mediterráneo. ¿Crees que realmente se muere?
Es cierto que sufre muchas "agresiones" pero me cuesta aceptar que se esté muriendo; tú sabes que he elegido para vivir este rincón mágico que es "es port de Maó", y que disfruto saliendo a navegar y al hacerlo me siento satisfecho como menorquín por la forma en que hemos sabido preservar nuestra costa, sin cometer las barbaridades visibles en otras zonas costeras; por lo demás deseo que consigamos frenar el deterioro del Mediterráneo y consigamos recuperarlo o "sanearlo" convenientemente.

Últimamente Maó está en la cuerda floja. ¿Qué sucede?
Yo diría que falta actividad ciudadana; el centro histórico de la ciudad, especialmente los fines de semana carece de "vida"; se hicieron cosas muy acertadamente como pueden ser la reforma del Claustre del Carme o la reforma de la plaza de Alfonso III y otras mejoras pero no se han sabido aprovechar convenientemente, creo que en el futuro toda la zona centro pasará a ser peatonal pero si la mentalidad de los comerciantes no varía, todo cuanto se haga será insuficiente.

Abogas, creo entender, por una actuación conjunta Ayuntamiento-comerciantes.
Sí, pero bien orquestada, y consensuada, sin imposiciones y con visión real y objetiva.

Volvamos al ciclismo, ¿crees que Menorca es un "paraíso" a descubrir para el turista amante del ciclismo?
Lo es, ten en cuenta que en Europa el ciclismo es una realidad y que muchos aficionados a salir de vacaciones quieren seguir practicándolo y descubriendo "nuevos horizontes" y Menorca, todavía, en este aspecto, sigue siendo virgen.

Para ti, ¿qué corredor ha sido el número uno?
Mi ídolo, mi número uno es Eddy Mercks, también admiré a Pérez Francés y no digamos a Perico Delgado o a Miguel Induráin, pero el belga era de otra galaxia.

Alberto Contador, ¿es el sucesor natural de Induráin?
Posiblemente e incluso creo que Contador, por la edad que tiene, superará el palmarés de Miguel Induráin que no es moco de pavo ya que entre otros títulos ganó cinco tours de Francia y dos giros de Italia.

Tú te codeas con muchos de los ciclistas que antaño nos emocionaron con sus gestas, ¿cómo son al colgar la bici, como personas?
Les conozco a todos, o a casi todos y son gente con una mentalidad especial, ten en cuenta que cuando están en activo entre entrenamiento y las pruebas en que participan viven aislados, en su mundo, luego, en la temporada de descanso se refugian en su casa, con los suyos pero, son buena gente, de buena pasta… Te podría relatar mil anécdotas de Pedro Delgado, de Julio Jiménez y de otros muchos y comprobarías su calidad humana, que es mucha.

Estuviste, estás y me imagino seguirás siendo "rotario". Dame una pincelada sobre este tema.
Durante 15 años pertenecí al Rotary Club de Menorca, incluso fui presidente pero en un determinado momento llegué a la conclusión de que era necesario que existiera un nuevo club y fundé el Rotary Club Mahón-Mô y sigo, como no podía ser de otra manera, estrechamente vinculado al movimiento "rotario"; como anécdota añadiré que en cierta ocasión, en Italia, en el transcurso de una cena, conocí a Gimondi y a Victorio Adorni -dos caballeros del ciclismo. El primero de ellos, en la clausura, recuerdo que nos dijo que de Eddy Mercks "había aprendido a perder".

Vivir y dejar vivir, ésta ha sido tú máxima. ¿Me equivoco?
No, no te equivocas, aunque se defender y defiendo mis planteamientos pero soy de los que admiten la confrontación dialéctica y asumo mis errores cuando constato que los he cometido, pero procuro hacer y dejar vivir… voy a mi aire pero con espíritu constructivo y mentalidad de equipo.

¿Tienes aspiraciones políticas?
Actualmente no, pero las tuve; recordarás que en las generales del 93 me presenté con Unión Menorquina; lo hice sobre todo por la amistad y el afecto que sentía por Biel Martí, en paz descanse; luego, tras esta experiencia comprendí que la política no era para mí, que ambos éramos incompatibles.

¿Algún deseo en la recámara?
Los tengo; me gustaría ser el delegado del equipo ciclista español en Londres-2012, porque llevo muchos años "cuidando" de ellos, de los ciclistas que compiten en pista y también me gustaría ver, en el 2016, en Río de Janeiro, a algún corredor de las Islas formando parte del equipo nacional, algo que es posible porque los hay muy buenos y que apuntan muy alto.

Y a la vida, ¿qué le pides?
Salud, sobre todo salud y que al final del día me encuentre a gusto con los míos.

Charlar con Arturo Sintes es como ir abriendo una serie de puertas y adentrarte en multitud de "mundos" por los que él, de una forma u otra, ha ido transitando.

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