Si la residencia geriátrica y centro de día de Sant Lluís hubiese adjudicado ayer plazas y habitaciones posiblemente se hubieran visto obligados a colgar el cartel de completo. Lluïsers y visitantes elegían habitación, informaban de sus preferencias y sobre todo, no paraban de asombrarse de la amplitud, la claridad y la funcionalidad del centro, todo ello, durante la jornada de puertas abiertas que el Ayuntamiento de Sant Lluís y la empresa que gestionará el centro sociosanitario Centre Secretari Coloma ha organizado para este fin de semana.
"El geriátrico me ha gustado tanto que no sabría qué destacar", apuntaba Asunción Victory de 77 años de edad, natural de Alaior aunque afincada en Sant Lluís desde los 13 años. Añadía que "después de tanto tiempo de oír hablar del centro y de ver su aspecto exterior, nunca me hubiera imaginado que los interiores fueran tan acogedores y con tanta claridad". Victory se mostraba especialmente maravillada con las dos salas polivalentes de la planta sótano "donde todos podremos ir a jugar o a participar en los talleres que se organicen".
Este espacio, según apunta la teniente de alcalde Carol Marquès, se destinará al pueblo, a todos aquellos que deseen utilizarlo, "porque la filosofía del centro se basa en la vitalidad, queremos que esté vivo, y que sea un lugar donde interactúen todas las entidades de Sant Lluís". Avanza que el Club de Jubilados ya ha solicitado estas dos salas para desarrollar actividades.
La acompañante de Asunción Victory, Maria Carreras Sintes, de 83 años de edad y de Sant Lluís, aseguraba que "con este aspecto ir a un geriátrico es otra cosa" y añadía que "el edificio está muy bien ideado para las personas que necesitan atención".
En esta línea se postulaba Margarita Carreras de 76 años quien comentaba que "es de lo mejor que hay en Menorca, nadie sabe si vamos a venir pero con esta visita ya sabes donde vas. En nuestro caso, cobramos una pensión de 700 euros, no sé si podríamos adquirir una plaza". Para ella, el equipamiento de los baños, la enorme terraza exterior y la gran claridad que, sin duda, da esplendor al centro, son los principales argumentos que convierten la residencia en un espacio cómodo y próximo.
Otro visitante, Francisco Fornals, destacaba en positivo y como gran incorporación a este tipo de infraestructuras sociosanitarias, las cámaras que cuelgan en los pasillos gracias a las que se podrá conocer la ubicación de cada usuario mediante un GPS y unas pulseras que deberán llevar todos los residentes. A su vez, servirá de alarma por si necesitan algún servicio conociendo en seguida quién ha llamado y dónde se encuentra. Pero coincidía con otros visitantes en el error de unir dos habitaciones individuales a través del baño. "Las personas con una cierta edad suelen frecuentar el baño con bastante asiduidad y es un poco molesto que éste sea compartido con el residente vecino. Tal vez hubiera sido preferible haberlos hecho más sencillos y todos individuales" sugirió y planteó a su vez la colocación de fotografías en las puertas de cada residente para evitar posibles desorientaciones.
Respecto al coste por usuario, Carol Marquès informa que las personas que adquieran una plaza en la residencia geriátrica (sin ser destinadas por motivos de dependencia) deberán pagar 1.975 euros mensuales. En el caso del centro de día, el precio se sitúa en 40 euros diarios para aquellos usuarios que soliciten la modalidad en pensión completa y 25 euros para quienes tan sólo soliciten estancia a media pensión. Marquès manifestaba ayer que la apertura oficial depende de la firma de un convenio con el Govern balear para adjudicar las plazas de dependencia aunque las previsiones es que a finales de año o principios de 2011 el centro funcione a pleno rendimiento.
Ayer por la mañana el centro sociosanitario fue visitado por autoridades políticas y entidades del pueblo "quienes han transmitido el acierto del centro", aseguraba Marquès. Por la tarde pasaron más de 200 personas.
La residencia geriátrica y centro de día se puede visitar hoy de 10 a 13 horas y de 16 a 19 horas.