El mar no es un vertedero mágico que engulle todo lo que se le eche sin ninguna consecuencia. Cualquier residuo que se lance al agua perjudica el universo de vida que hay bajo el mar, y al fin y al cabo, también acaba perjudicando al ser humano. Con esta máxima, 26 voluntarios participaron ayer en la jornada de limpieza del fondo marino de Sa Farola, organizada por el club de buceo Scuba Plus dentro del llamado Project Aware. El resultado de hora y media bajo el mar fue la recogida de 517 kilos de basura, que también se recuperaron del litoral de la zona.
Entre los residuos destacaron tuberías, restos de andamios de obras, neumáticos, la parte trasera de un coche, cables de acero o restos de una motocicleta. Eso bajo el mar, puesto que en litoral se recogieron hasta 384 colillas, 40 mecheros y 57 cajetillas vacías de tabaco, entre otros residuos y enseres.
El trabajo se dividió entre aquellos que bucearon (entre ellos cinco miembros del Centro Tritón, de Cala Torret) y los que limpiaron el litoral. Estos últimos fueron casi todos adolescentes, niños y niñas de entre 11 y 13 años, que demostraron que las nuevas generaciones crecen con una conciencia ambiental de la que deberían aprender muchos mayores. Además, entre los presentes en la jornada de ayer, un ilustre, André Ghilain, uno de los mil europeos más importantes del siglo, que ha cruzado varias veces en solitario el Atlántico en velero, y a quienes muchos consideran el sucesor de Jacques Cousteau.