Uno de los tres propietarios de la discoteca Tonic, Carlos Esbert, ha asegurado que la empresa presentará una demanda por daños y perjuicios contra el Ayuntamiento de Es Castell, por el cierre del establecimiento decretado hace más de cuatro años. Una sentencia judicial ha revocado recientemente la clausura en 2006 de la discoteca ubicada en la urbanización de Son Vilar, en Es Castell.
Carlos Esbert ha asegurado que el próximo miércoles día 3 de noviembre se reunirá con el alcalde de Es Castell, Juan Cabrera, para instar a la ejecución de la sentencia y, con ello, proceder a la reapertura del establecimiento de ocio, aún en el supuesto de que el Ayuntamiento de Es Castell decida interponer un recurso contra la sentencia judicial. Esbert mantiene que la decisión del juez avala la posibilidad de reabrir la discoteca, independientemente de que el Consistorio presidido por el alcalde Juan Cabrera recurra contra dicha sentencia.
Además, Esbert ha señalado que los tres socios han decidido presentar una reclamación por daños y perjuicios contra el Ayuntamiento de Es Castell, con el objeto de compensar económicamente los más de cuatro años que la discoteca ha permanecido cerrada al público por la decisión del equipo de gobierno presidido por la anterior alcaldesa Irene Coll.
Esbert no ha querido precisar la cantidad que se reclamará al Ayuntamiento, puesto que todavía no se ha contratado a un perito para que cuantifique el importe derivado de la clausura del local. El copropietario de Tonic ha asegurado que el establecimiento, con una antigüedad de 42 años, nunca dio de baja la licencia inicial y que el permiso de reapertura había sido aceptado. Asimismo, ha precisado que se intentará conseguir un tipo de clientela, mayor de 30 años, para evitar que se perjudique a los vecinos de la urbanización.