El Consell y la Asociación de Vecinos y Usuarios de Muelles de Addaia (Es Mercadal) formalizaron ayer un convenio de colaboración para la ordenación y gestión de 36 fondeos frente al puerto, en la zona conocida como Clot dels Ases.
El proyecto afecta a unos 35.000 metros cuadrados de lámina agua y pretende acabar con los cerca de 60 fondeos ilegales que proliferan en la zona y que en ocasiones dificultan la navegación, además de dañar una zona ambientalmente protegida por Red Natura 2000.
Se trata de una primera actuación cuyo coste ronda los 18.000 euros, anticipo de la aplicación del Plan Insular de Costas (PIC) que deberá determinar la capacidad de carga náutica de los diferentes puntos del litoral menorquín. Con este convenio Addaia sigue los pasos dados ya en la misma dirección por las asociaciones de usuarios de fondeos y amarres de Es Grau y Canutells.
El acuerdo supone la cesión de la gestión de los fondeos por parte del Consell a la asociación, después de que Costas autorizara la concesión. Además de la gestión, la entidad vecinal de Addaia se encargará de las labores de vigilancia de la zona con el fin impedir la proliferación de nuevos fondeos ilegales.
La concesión será por 15 años y permitirá el fondeo reglado de 36 embarcaciones de más de 12 metros de eslora, priorizando las peticiones vecinales. Seis de los puntos de atraque estarán destinados para embarcaciones en tránsito.
La cuota que deberá abonar un velero de 12 metros por fondear en la zona será de unos mil euros al año, "un precio asequible para quienes no tienen tanto poder adquisitivo porque aquí no hay ánimo de lucro", apuntó ayer Francesc Mercadal, representante de la Asociación de Vecinos y Usuarios de Muelles de Addaia.
"Esta misma embarcación pagaría unos 5.800 euros anuales por atracar en Puerto Luz de Addaia y 12.000 en el caso de Maó, aunque hay que reconocer que en los dos últimos casos los usuarios disfrutan de más servicios", añadió.
Mercadal hizo estas declaraciones junto a los pantalanes que gestiona la entidad en Addaia, en el acto de presentación del convenio al que asistieron el presidente del Consell Marc Pons; el conseller de Ordenación del Territorio, Joan Marqués; el alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller; el representante de PIME y presidente de la Asociación de Menorquina de Empresarios Náuticos (ASMEN) y Francesc Sastre, representantes de las entidades recreativas de CAEB.
Marc Pons destacó el trabajo que realiza la institución insular en la reordenación de los puntos de fondeos del litoral menorquín. "Se está demostrando que desde el acuerdo y de forma tranquila se pueden acometer cuestiones cargadas de tensión cono es la reordenación del litoral", dijo.
El alcalde de Es Mercadal incidió por su parte en el destacado papel que juega la actividad náutica en las zonas turísticas de la Isla y la respuesta que esta reordenación ofrece a la histórica demanda de los amarristas y usuarios de Addaia. "Lo importante no es que haya más amarres sino que quien los quiera, los tenga", matizó. En este sentido el presidente de la asociación expresó su deseo de ampliar en un centenar más los 238 amarres que actualmente explota la entidad.
Recordó que la reordenación de los 60 fondeos ilegales que se acometerá en esta zona gracias al convenio con el Consell, dejará sin fondeo a cerca de una treintena de embarcaciones que podrían ser absorbidas en los muelles de la concesión de la asociación en el caso de que se aprobara dicha ampliación y aun así restarían otros 70 puestos por ocupar.
El conseller de Ordenación del Territorio, Joan Marqués, resaltó que el convenio con la entidad vecinal contempla igualmente el balizamiento de una zona ambientalmente protegida con el fin de impedir el acceso de las embarcaciones a motor a dicho espacio.
Marqués subrayó asimismo la transparencia del proceso y recordó que en la zona de Addaia, Na Macaret y Cala Molí se contabilizan algo más de 800 embarcaciones en temporada alta que hacían "ineludible" esta primera reordenación de fondeos como anticipo a la aplicación del PIC.