La planta de Quesería Menorquina paralizó ayer al mediodía una de las tres líneas de producción, en concreto la producción de queso rallado al agotarse el stock de bobinas de plástico utilizadas como envoltorio del producto. Esta incidencia obligó a unos 18 trabajadores de los turnos de mañana y tarde a realizar labores auxilares en la empresa durante su jornada laboral (limpieza y mantenimiento de maquinaria). Las líneas de porciones y de lonchas, en cambio, funcionaron con normalidad, aunque según informó ayer el presidente del comité de empresa, Antonio Olives, la línea de lonchas estuvo paralizada prácticamente toda la semana anterior y la de porciones durante dos días y un turno.
Olives explicó que la empresa esperaba la llegada a la Isla del pedido de bobinas a principios de semana y ante la tardanza, se optó por ralentizar el ritmo de trabajo en la línea de rallado, pero finalmente el stock se agotó ayer. Debido a esta incidencia, la producción semanal de unas 30 toneladas prevista esta línea apenas superaba ayer las 12 toneladas. "El problema es que la semana que viene no se sabe que pasará. Fabricamos pedidos que deberían estar servidos y por tanto deberíamos ponernos al día y producir lo que ahora hemos dejado parado para atender a los clientes, pero no hay nada asegurado", explicó el presidente del comité de empresa.