Tomás Melgar Noguera (Palma, 1969) es un hombre prudente, amable, de mirada y palabra directas, que no esconde el alto nivel de implicación que tiene para con la empresa en la que trabaja. Por eso, por lo que sabe y cuenta (y lo que prefiere no contar aunque sabe), por ser ingeniero superior aeronáutico y estar vinculado a AENA desde los 25 años, el director del Aeropuerto de Menorca parece un tipo inteligente. La impresión la confirma el hecho de que "ser un buen gestor" sea a su juicio la cualidad más importante para ocupar un cargo como el suyo -"un aeropuerto no deja de ser una empresa", apunta- y de que atribuya los buenos resultados del aeródromo menorquín al gran equipo humano que trabaja en él.
En los tiempos que corren ¿ser director de aeropuerto es una profesión de riesgo?
No (risas).
¿Es lo que deseaba ser?
¿Ser director del aeropuerto? Sí, tu vida profesional va evolucionando y yo he ido evolucionando hacia aquí. Quizás al principio pensaba otras cosas pero los últimos años, sí quería esto.
¿Por qué este trabajo?
Siempre me ha gustado el mundo de la aviación, estudié ingeniero aeronáutico y al principio no sabía si entrar por el mundo de las compañías aéreas o de los aeropuertos, el de las compañías varía mucho y me decanté por los aeropuertos. Cuando hice el proyecto de fin de carrera ya fue de aeropuertos y después entré en AENA y aquí estoy.
¿Se gestionan bien los aeropuertos en España?
Yo creo que sí.
¿También a nivel de inversión?
Menorca es uno de los más endeudados de España como consecuencia de inversiones que aquí han sido cuestionadas por algunos sectores.
¿Merecen la pena estas fuertes inversiones?
Los aeropuertos son básicos para las comunicaciones y en una Isla todavía más. En Menorca se ha hecho un aeropuerto que asegure que Menorca no tenga ningún problema respecto a sus comunicaciones aéreas. Hay sitios donde los aeropuertos pueden ser más rentables y otros donde menos pero en España hay un esquema de funcionamiento que hace que los aeropuertos no les cuesten nada a los españoles. Al final lo pagan los viajeros y pagan muy poco porque las tasas que se pagan por aeropuerto en España son la tercera parte de las que se pagan en Inglaterra o la mitad que la mayoría de países europeos y mucho más baratas que las de países como Egipto donde la mano de obra y todo en general es mucho más barato.
¿Esta afirmación de que no cuestan nada puede verse comprometida por la proliferación de aeropuertos en lugares pequeños?
No creo porque del global de las inversiones que tiene AENA en todos los aeropuertos de la red, los pequeños suponen poco y porque la situación en la que está AENA en estos momentos, comparada con la de otras empresas aeroportuarias es excepcional. Como todo el mundo sabe los aeropuertos de Londres, de París o de las grandes ciudades alemanas están saturados y es muy complicado ampliar aeropuertos porque se tarda mucho, se ocupa mucho terreno y se necesita cumplir con una serie de requisitos. En España el Aeropuerto Madrid-Barajas está recién ampliado y tiene posibilidades de crecimiento con las instalaciones que tienen ahora gracias a esas inversiones, el de Barcelona y Palma, igual, el de Málaga está recién inaugurado, y el de Alicante a punto de inaugurarse. Estamos en mucha mejor situación, está claro que se han hecho muchas inversiones pero con ellas se puede aceptar tráfico sin mayores problemas y las inversiones se recuperarán.
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