Los bares y cafeterías han registrado unas pérdidas de entre el 20 y el 25 por ciento desde la entrada en vigor de la Ley Antitabaco. La situación aún es más alarmante en aquellos establecimientos en que no tienen posibilidad de ocupación de vía pública.
Es lo que denuncia la Asociación Menorquina de Cafeterías, Bares y Restaurantes de PIME-Menorca, después de que su junta directiva analizara ayer en Es Mercadal la incidencia de la prohibición de fumar en los establecimientos de restauración.
Durante el primer mes de entrada en vigor de la normativa estatal, la asociación afirma que ha pasado de informar sobre las dudas y aclaraciones sobre "este importante cambio normativo para el sector", a recoger las valoraciones e incidencias de los asociados "con el fin de emprender posibles acciones colectivas de presión que hagan modificar de nuevo la ley".
La asociación anuncia que mediará ante los ayuntamientos de la Isla para que sus ordenanzas de ocupación de vía pública contemplen "esta nueva situación, desconocida hasta la fecha en nuestro entorno social". También existe preocupación en el colectivo empresarial por los posibles problemas de ruidos y convivencia que puedan surgir en las salidas y accesos de los locales de ocio y restauración.
La junta directiva ha acordado informar y asesorar a todas aquellas cafeterías, bares y restaurantes interesados sobre la forma de proceder para la recogida de firmas con el objetivo de instar al Gobierno central a que modifique de nuevo la ley. El colectivo adscrito a PIME-Menorca avanza que coordinará el envío de las hojas de apoyos recogidas a la Federación Balear de Restauración para que se encargue de trasladarlos al ámbito nacional.