Menorca envía a la atmósfera un 27,4 por ciento más de gases de efecto invernadero de los que se recomiendan en el Protocolo de Kyoto. Así se desprende del último estudio del Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM), que analiza las cifras de 2009. En ese año, desde la Isla se emitieron 689.624,5 toneladas de dióxido de carbono. Para tener una idea del volumen que eso representa, hay que trasladarse al 1990, año que se tomó como punto de partida para el cálculo de las emisiones que se permitirían según el Protocolo de Kyoto.
España acordó que hasta el año 2012, las emisiones de CO2 a la atmósfera se incrementarían solamente un 15 por ciento. Los años pasaron, y se comprobó que el país estaba muy lejos de alcanzar ese objetivo, lo que llevó a aprobar un segundo plan, en el año 2006, que alzaba un poco el listón, y permitía un incremento de hasta el 37 por ciento de las emisiones desde el año 1990. Este aumento de las cuotas, sin embargo, tampoco ha servido para que Menorca cumpla el propósito, y se sitúa un 27,4 por ciento por encima del límite pactado en 2006. Si se hubiera mantenido el límite inicial, Menorca estaría aún más por encima, un 74,5 por ciento.
La buena noticia, no obstante, es que en el año 2009 la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera desde Menorca se redujo un 6,4 por ciento, siendo el segundo año en que esta cifra disminuyó desde el año 1993. Solamente los años 91, 92 y 93, la Isla estuvo por debajo de los índices máximos de emisión de CO2 pactados en el Protocolo de Kyoto.