"Menorca es una de las zonas de España que tiene las mejores vacas desde el punto de vista morfológico y reproductivo, según afirman nuestros técnicos de calificación". Así de categórica se expresó ayer la directora gerente de la Confederación de Asociación de Asociaciones de Frisona Española, Sofía Alday, quien asistió como invitada al veinticinco aniversario del Concurso Morfológico de Ganado Vacuno Frisón de Menorca que se celebra este fin de semana en el marco de la Fira del Camp de Alaior.
Sin perder de vista las vacas participantes en el certamen, Alday destacó la gran evolución genética experimentada por la raza en Menorca. En apenas un cuarto de siglo la capacidad productiva de las vacas ha pasado de apenas 4.000 litros de leche anuales a superar los 9.000. "No hemos llegado al techo, pero el excesivo enfoque que se ha dado a la mejora de la raza desde el punto de vista reproductivo ha deteriorado otras características más funcionales del animal", apuntó. De hecho, la Confederación trabaja desde hace tiempo en colaboración con sus 8.100 ganaderos asociados en toda España para lograr animales más armónicos y proporcionados. "Buscamos vacas que sean buenas reproductoras, que sean más longevas y que tengan menos problemas veterinarios. Queremos animales que sean más rentables, porque hay que tener en cuenta que hasta que una vaca comienza a producir debe ser mantenida durante dos años", explicó.
Ese decidido empeño de los ganaderos menorquines por lograr mejores empleares en los últimos 25 años a través de la Asociación Frisona Balear, así como el peso de las explotaciones en la economía insular fueron ayer expresamente reconocidos por las autoridades asistentes al acto de apertura de la muestra ganadera. "Sobre su abnegada y sacrificada labor, hemos construido el resto de menorquines nuestro futuro", resaltó el conseller balear de Presidencia, Albert Moragues.
En el mismo sentido se expresó el presidente del Consell, Marc Pons, quien hizo hincapié en los lazos que unen a la mayoría de los habitantes de la Isla con el sector primario. "Si nos remontamos una o dos generaciones vemos que todos hemos salido del campo", comentó, al tiempo que destacó la capacidad innovadora de los payeses que hace ahora 50 años introdujeron la raza frisona en la Isla. Para la consellera insular de Economía, Antònia Allès, la Fira de Alaior es una ventana abierta a la esperanza, reflejo del trabajo conjunto y, con él, de nuevas oportunidades para el campo.