La entrada en funcionamiento del puerto exterior de Ciutadella modificará el mapa de las conexiones marítimas de Menorca con el resto del mundo, y algunas navieras ya apuestan claramente por la nueva infraestructura de poniente en detrimento del puerto de Maó. Así, Baleària, que hasta ahora opera una ruta desde el puerto de levante hasta Barcelona, centrará las conexiones con la capital catalana en Ciutadella, desde donde este verano saldrán entre 12 y 14 frecuencias a la semana, y en invierno operará cinco conexiones semanales. En Maó, Baleària dejará solamente una nueva ruta que espera abrir con Valencia.
Un camino similar seguirá Acciona, que este año no puede operar en Ciutadella porque el dique no es compatible con la dimensión de sus barcos. El próximo año, cuando los duques de alba estén instalados, la naviera quiere operar la misma ruta que Baleària: Ciutadella-Alcúdia-Barcelona, mientras que desde Maó se enlazaría con Palma y Valencia. Iscomar también pretende aumentar su presencia en Ciutadella con una ruta que una la ciudad de Poniente con algún puerto del litoral catalán.
MANTENER EL EQUILIBRIO
A pesar de esta situación, las autoridades políticas presentes en el acto insistieron en hablar de equilibrio entre los dos puertos. El presidente del Consell, Marc Pons, apelaba a "superar determinados debates, a encarar el futuro haciendo piña y a optimizar todas nuestras infraestructuras". El presidente de Autoritat Portuària de Balears, Francesc Triay, responsable del puerto de Maó, aseguraba que "el equilibrio entre los dos puertos dependerá de las instalaciones complementarias que se construyan". Triay asegura, por ejemplo, que los dos puertos "deberían ir de la mano a la hora de promocionar el turismo de cruceros, puesto que Menorca reúne todas las condiciones para atraer a estos turistas, y hay una gama de buques por debajo de la eslora máxima que son muy adecuados para visitar la Isla".