El candidato popular al Consell y al Parlament, Santiago Tadeo, calcula que es posible un ahorro de un millón de euros mediante la reducción de cargos políticos en el organigrama de la institución insular.
Así lo afirmó ayer, argumentando que la actual consellera de Turismo y Trabajo, Joana Barceló, y en aquel entonces presidenta del Consell, amplió en 2007 el cartapacio del ejecutivo insular formando un gobierno con 25 directores insulares y once consellers "con la excusa de poder asumir todas las competencias que el Consell iba a gestionar tras la aprobación del nuevo Estatut y, de momento, el traspaso ha sido mucho menor de lo esperado y se han mantenido todos los cargos".
El líder popular plantea por tanto una agilización de la administración y la burocracia con el fin de reducir los trámites empresariales y que, por tanto, repercuta en generación de empleo. De esta manera, "contribuiremos a pagar los impuestos a los proveedores y cubrir las necesidades asistenciales de la Isla", explica, a lo que añade que "debemos conseguir seguridad jurídica en un clima de transparencia y austeridad".
Tadeo indica que este cambio de mentalidad administrativa "se aplicará en todos los ayuntamientos donde gobernemos". Por su parte, la alcaldable del PP al Ayuntamiento de Maó, Águeda Reynés, recuerda que en 2008, coincidiendo con el inicio de la etapa de Tur, echaron el cierre un centenar de empresas.
"La administración debe estar al lado de los empresarios porque dependemos de ellos, no podemos ponerles trabas administrativas puesto que la sociedad acaba desfalleciendo en sus intentos por conseguir un permiso de obra o de actividad", resalta.
De esta manera, Reynés afirma que su propósito es que la concesión de licencias de obra menor se haga en un plazo de un mes y las de obra mayor en tres meses.