El Recinto Ferial de Es Mercadal cerró este domingo un fin de semana de pura raza, con una feria destinada a rendir homenaje al caballo menorquín, un animal que con el paso del tiempo cada vez ocupa un lugar más importante entre el sector ecuestre nacional. Pese a que las condiciones meteorológicas amenazaban el sábado con arruinar la fiesta del equino insular, finalmente el tiempo acompañó con un bonito domingo primaveral que animó a la gente a acudir a la muestra. Según fuentes de la organización pasaron por el recinto este fin de semana aproximadamente 15.000 personas. Cabe destacar que tras 15 años de feria y 21 de concurso morfológico, se trata de una de las muestras más concurridas de la Isla, conjuntamente con la Fira del Camp de Alaior.
La jornada comenzó ayer a primera hora de la mañana con la celebración de las secciones pendientes del concurso morfológico, con cuyos resultados los jueces pudieron confeccionar finalmente el cuadro de honor de la competición. Posteriormente, se procedió en la pista central a la entrega de premios, una ceremonia que contó con la presencia de un buen número de representantes de las diferentes instituciones menorquinas.
Así se puso un broche de honor al evento organizado por la Associació de Criadors i Propietaris de Cavalls de Raça Menorquina, que pese a contar este año con un menor número de caballos hace una valoración positiva de la calidad de esta edición.