Veintiocho años de hegemonía socialista en el Ayuntamiento de Maó, en solitario o con alianzas, pueden llegar a su fin el próximo día 22 si se cumple el pronóstico de Infortécnica: mayoría absoluta del PP.
La encuesta encargada por el "Menorca" otorga a la candidatura del PP trece concejales, con una horquilla de entre 12 y 14 ediles, una sobrada mayoría para gobernar y que llevaría a un cambio histórico en el municipio, con Àgueda Reynés como primera alcaldesa del centro-derecha, ya que los 'populares' aglutinarían el voto de otras opciones minoritarias que, según este sondeo, no obtendrían representación, como Unió Menorquina (UMe) o Ciudadanos de Menorca (CMe).
La lista del PSOE obtendría ocho concejales y la horquilla se sitúa entre los 6 y los 8 representantes. A diferencia de lo ocurrido en 2007, cuando los socialistas obtuvieron 9 concejales, en esta ocasión Tur no podría revalidar la Alcaldía con un pacto postelectoral, ya que Infortécnica vaticina un descenso de la izquierda.
El PSM se mantendría más estable, y al igual que en los anteriores comicios, podría pasar de los cero concejales que se desprenden de las encuestas a los dos ediles, esa sería la horquilla. Pero Esquerra de Menorca (EM-IU), de nuevo liderada por Mateu Llabrés, perdería su único representante en la Corporación. Así, las posibilidades de reeditar el pacto de gobierno actual se complican para el PSOE, ya que otra de las fuerza políticas actualmente en el gobierno, Els Verds, se presenta en esta ocasión en solitario y, según la encuesta, tampoco obtendría los votos suficientes para tener representación.
Concentración
El sondeo dibuja un bipartidismo acusado y un pesimismo social generalizado, respecto a la situación económica de Menorca y en concreto del municipio de Maó, que lleva al voto útil.
El PP y el PSOE concentran la intención de voto, ya que un 30,6 por ciento de los encuestados afirma que votará a los 'populares' frente a un 20,7 por ciento que lo hará al PSOE. El porcentaje elevado de indecisos, un 26,1 por ciento, a una semana escasa de celebrarse las elecciones, supone que todos los partidos deberán echar el resto en los días que quedan de campaña. Un 18 por ciento de los entrevistados afirma que se abstendrá o votará en blanco, mientras que un 2,5 por ciento se inclina por el PSM y un 2 por ciento por otras formaciones. Sin embargo, el dato clave de este análisis se desprende del elevado porcentaje, 35,7 por ciento, que confiesa que cambiaría su voto respecto a las pasadas elecciones municipales.
El electorado pasaría factura de la crisis económica a los gobiernos de izquierdas y en concreto al PSOE, al que le resulta difícil desvincularse de la coyuntura nacional.
A la pregunta de cómo es la situación económica y social de Maó, comparada con la de hace dos años, un 47,9 por ciento de los encuestados responde que es peor y un 23,1 por ciento afirma que es mucho peor. Por lo que la percepción negativa alcanzaría a un 71 por ciento de los votantes que respondieron la encuesta. Sólo un 17,4 por ciento cree que la situación es semejante a la de hace dos años y un escueto 5 por ciento asegura que es mejor.
El candidato del PP, Santiago Tadeo, consigue la victoria sobre el actual presidente del Consell y número uno del PSOE, Marc Pons, según la encuesta de Infortécnica. El margen es más ajustado que en el Ayuntamiento, ya que el PP obtendría 7 escaños frente a los 6 del PSOE (27,2 por ciento de los votos). El sondeo no otorga ninguna representación a las otras fuerzas políticas, incluido el PSM que lidera Maite Salord. En cuanto al Parlament, PP y PSOE empatarían a seis diputados.