No se lo creía. Misericordia Sugrañes no sólo ha conseguido hacerse con el mandato en Alaior, si no que, además, se convertirá en la primera alcaldesa en la historia del municipio.
¿Qué tal fue la celebración el domingo por la noche?
Fue fantástica, aunque algo corta para mí. Tuve que irme pronto porque debía atender otros asuntos. La verdad es que no me lo creía. Los días previos oía a la gente hablar del cambio pero no me esperaba que, después de 16 años de gobierno socialista, la victoria se produjera de esta manera. Pensé mucho en mi familia, que me ha arropado en todo momento. También tuve la suerte de poder compartir la noche electoral con todos mis seres queridos más cercanos, sólo faltó mi hermano pequeño. Después estuve hablando durante horas con mi marido, de las anécdotas, de los planes... Pasó mucho tiempo hasta que me pude dormir.
Y, ¿cómo fue la jornada de ayer?
Lo primero que hice fue leer todos los periódicos y fue cuando me di cuenta realmente de la situación y el resultado. Jamás pensé que pasaría esto. También está el tema de ser la primera alcaldesa del municipio. Ya fui la primera abogada cuando llegué a Alaior en 1981, no sólo como mujer, ni no como profesional. Creo que en aquel momento había pocos abogados en la Isla. Eso, quieras o no, siempre te hace ilusión. Después, he tenido una pequeña reunión con algunos compañeros. Ayer fue un día muy "frenético" de muchos mensajes, llamadas... fue un no parar.
¿Cuáles son sus planes más inmediatos?
Hoy mismo, a las 8 de la mañana, voy a ir al Ayuntamiento para hablar con el alcalde porque sé que tienen una mesa de contratación a las 8.30 para la venta de las parcelas de Torre Solí. A nosotros no nos parecía bien que esto se hiciera antes de las elecciones, así que voy a ir para averiguar a qué viene tanta prisa y en qué se invertirá ese dinero.
También quiero planificar las áreas del Ayuntamiento con los ocho concejales. Habrá modificaciones en el organigrama con el fin de agilizar los trámites y la atención ciudadana. El jueves tengo una reunión con Pau Morlà para hablar sobre el traspaso de papeles y quiero llamar a Josep Portella y al resto de concejales para reunirnos y hablar. Quiero hacer todo esto durante la semana, que se note que se mueven las cosas, que cuatro años pasan muy rápido y hay mucho que hacer. La población debe notar que se produce el cambio.