El grupo formado por comerciantes y vecinos del centro de Maó que puso en marcha una recogida de firmas con el fin de que finalice el campamento de indignados de la plaza Colón ya cuenta con más de 500 firmas, y hoy será el día en que soliciten que les reciban en el Ayuntamiento para presentarlas y exigir que se aplique la normativa vigente que hace referencia a la ocupación de la vía pública.
Desde la agrupación se asegura que no se busca conflicto y que tampoco es una iniciativa contra el 15-M. "Lo que queremos es que las personas que ocupan este espacio vean que, sólo de las cuatro calles que pegan a la plaza, se han recogido más de 500 firmas y que vean que no se respalda su decisión de permanecer ahí más tiempo. No creemos que la solución a los problemas que plantean sean montar caceroladas, tiendas de campaña y una cocina en plena calle. Nos cuesta mucho mantener nuestros negocios cada día y queremos dar buena imagen", dice uno de los comerciantes.
El hecho de presentar las firmas en el Ayuntamiento será una manera de expresar el malestar de este colectivo y dar apoyo a quien tome medidas contra esta acampada. "Es absurdo seguir así. Dicen que se irán el fin de semana pero quieren dejar sillas, mesas, puesto de información y demás material en la plaza. Seguirán pasando los días y se apuntará gente que venga a Sant Joan y no tenga donde dormir. Con la excusa de las asambleas, montarán la tienda en pleno centro. La normativa tiene que ser para todos igual, que nosotros pagamos nuestros impuestos. Los espacios públicos deben respetarse y deben usarlos todos los ciudadanos. No puede ser que haya que trasladar las actividades que se puedan hacer en la plaza Colón a otro lugar porque están ellos. No tiene sentido ni objetivo que estén durmiendo ahí".
Comerciantes y vecinos se sienten preocupados y reiteran que no se busca conflicto con los "indignados" pero que la normativa debe cumplirse.