La playa de Es Canutells, en Maó, fue el escenario en la madrugada del sábado al domingo de una gamberrada que se saldó sin consecuencias graves. La playa amaneció ayer con manchas provocadas por el uso de los extintores de las embarcaciones,8 así como con varios objetos extraídos de las barcas dispersados por la zona de baño de la urbanización.
Durante la noche del sábado al domingo una decena de jóvenes, la mayoría menores de edad, acamparon en la playa de Es Canutells y aprovecharon su pernoctación en la zona para "entrar en todas las embarcaciones, cerca de unas treinta -sus pisadas así lo corroboraron- y apoderarse de algunos objetos", según las explicaciones de un vecino quien bajó a la zona a primera hora de la mañana encontrándose con el grupo de jóvenes durmiendo en la playa. Su presencia hizo que algunos se dieran a la fuga.
Este ciudadano explica que los acampados "hurtaron bengalas, extintores, prismáticos, jerseys y objetos de pesca", algunos de ellos encontrados en las dos tiendas de campaña instaladas sobre la arena y otros esparcidos por la zona totalmente destrozados. A su vez, fueron detectadas en la playa varias toallas procedentes del hotel Canutells.
Los vecinos llamaron al 112 y se personó al lugar de los hechos una patrulla de la Policía Nacional que, tras dar con los jóvenes, les tomó declaración.
A pesar del susto inicial, las embarcaciones no sufrieron daños mayores y la urbanización gozó enseguida de la tranquilidad que habitualmente reina en la zona.