El mapa español se tiñó de azul tras las elecciones locales y autonómicas del pasado mes de mayo y los populares confían poner el colofón a su trabajo viendo posarse las gaviotas sobre La Moncloa el próximo domingo. "Hemos de cerrar el círculo iniciado el 22-M", subrayó ayer el presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá, durante el mitin celebrado en el Orfeón Mahonés, que finalmente no contó con la anunciada presencia del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón-
Bauzá, más informal y relajado que en anteriores ocasiones -tal vez debido a la celebración de su 41 cumpleaños- pronunció un discurso cargado de tintes humorísticos aunque no falto de contenido. El jefe del Ejecutivo autonómico centró su alocución en criticar la "irresponsabilidad" de los socialistas, a los que acusó de "ir por la vida prometiendo para quedar bien sabiendo a priori que no disponían del dinero necesario".
En esta línea, Bauzá remarcó que su gobierno ha apostado por la austeridad y la reducción del gasto, tal y como demuestran los Presupuestos de la comunidad autónoma para 2012, que calificó de "ortodoxos". "Si tuviéramos una bañera con agujeros, nosotros optaríamos por tapar los orificios mientras que los socialistas empezarían por abrir el grifo", ejemplificó. El presidente balear recuperó la seriedad al referirse a la prima de riesgo española, que actualmente alcanza los 436 puntos básicos.
"El límite de intervención son los 500 puntos y todo el mundo está esperando lo que pasará el domingo", aseveró Bauzá, quien acusó al gobierno de Zapatero de no hacerse respetar en Europa. "Cuando gobernaba José María Aznar, España era un referente y era capaz de hacer llorar a Francia y Alemania. Ahora se ríen de nosotros", lamentó. El presidente del Govern consideró que su formación otorgará a España la oportunidad de avanzar y de participar en la toma de decisiones a nivel europeo de manera privilegiada. "Una cosa es ser Europa y otra es formar parte de Europa", concluyó.
ENCUESTAS
A pesar de que los sondeos vaticinan la victoria de los populares, los candidatos menorquines al Congreso y al Senado no parecen fiarse de las encuestas. El número tres de la candidatura del PP de Balears a la Cámara baja, Juan Carlos Grau, llegó a afirmar que los sondeos "pueden estar envenenados". En este mismo sentido, la candidata al Senado, Juana Francis Pons Vila, llamó a los ciudadanos que se sienten "engañados" por el PSOE a mostrar su enfado a través de las urnas el próximo domingo, lo que permitirá "sacar a los socialistas del gobierno y ponerlos donde se merecen".
Mientras Grau reprendió a los socialistas por "pedir pelea" antes de "pedir perdón", Pons Vila les reclamó que desde la oposición apoyen al gobierno de Mariano Rajoy. "No me gustaría que a nivel nacional actuarán como el PSOE de Menorca y Balears, que ejerce una oposición patética que llega incluso a rozar el ridículo", indicó.
El presidente del Consell, Santiago Tadeo, también se refirió a la actuación de los socialistas al frente de la máxima institución insular. "Han hecho poco y han gastado mucho", denunció Tadeo antes de afirmar que, tras doce años de gobierno, el PSOE "ha situado Menorca fuera del mapa de España y Europa".