El Aeropuerto de Menorca realizó ayer un simulacro de evacuación de la planta de embarque en el Edificio Terminal. En este ejercicio se simuló un conato de incendio en una cafetería situada en la zona norte del vestíbulo de embarque. Para ello, se contó con la participación de pasajeros reales, así como de diferentes colectivos como personal de Aena Aeropuertos, concesionarios, compañías, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Además, en esta ocasión colaboraron los alumnos del Grado Superior de Prevención de Riesgos Profesionales del instituto Pasqual Calbó.
El objetivo del simulacro planificado es, además de la protección de personas y bienes, comprobar el conocimiento del Plan de Autoprotección del Aeropuerto. De esta manera, se verifica el grado de conocimiento de dicho plan, su correcta aplicación y la capacidad y coordinación entre todos los colectivos responsables e implicados ante una situación de emergencia.
SECUENCIA DEL SIMULACRO
A las 16 horas se activó la señal de uno de los detectores ópticos de humos situados en el techo de una cafetería en la zona norte de embarque, por un incendio en la cocina de dicha cafetería. La alarma fue detectada por el Centro de Seguridad, que avisó al CECOA (Centro de Coordinación Aeroportuaria) y al Jefe de Vigilancia. Tras verificarla, se confirmó el conato de incendio así como la imposibilidad de neutralizarlo con los medios al alcance, motivo por el cual se activó el Plan de Emergencia y su correspondiente protocolo.
Se informó al Servicio de Extinción de Incendios (SEI) de la causa y localización del siniestro para su intervención inmediata, así como a la dirección del aeropuerto, responsables de mantenimiento, servicios y seguridad, y a las Fuerzas de Seguridad presentes en el recinto aeroportuario. El CECOA se convirtió en el CECOE, Centro de Coordinación de Emergencias, formado por los órganos de dirección de la actuación en el aeropuerto.
Dado que el humo se había propagado por la zona de embarque norte y la zona comercial anexa, el Jefe de Emergencia consideró necesaria que se efectuara la evacuación de toda la planta afectada.
Una vez controlado el incendio y verificado la inexistencia de humo en el interior del terminal, se llevaron a cabo las labores de mantenimiento precisas para dejar la planta de embarque en las condiciones necesarias, finalizar el simulacro de emergencia y así volver a operar con normalidad.
PLAN DE AUTOPROTECCIÓN
Todas las instalaciones aeroportuarias de Aena Aeropuertos disponen de un Plan de Autoprotección que sirve ante una emergencia real para minimizar las consecuencias que pudieran producirse y optimizar su gestión, garantizando así el cuidado de las vidas humanas y la continuidad o el restablecimiento de la operatividad aeroportuaria, con el menor impacto sobre las instalaciones.
El Plan se mantiene actualizado con la planificación, desarrollo, ejecución y análisis de simulacros generales de accidente aéreo, de emergencia y evacuación de edificios, en los que se enmarcó el ejercicio de ayer que puso de manifiesto el compromiso de Aena Aeropuertos con la prestación de un servicio seguro y de calidad. Asimismo, se da cumplimiento a la normativa de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en materia de planificación de emergencias en los aeropuertos, y a la legislación que a ese respecto aplican las administraciones nacional, autonómica y local.
Concentración en favor de los compañeros de Sevilla
Los trabajadores del Aeropuerto de Menorca se concentrarán el próximo viernes en favor de sus compañeros del aeródromo de Sevilla y no descartan iniciar acciones de protesta más contundentes en el caso de que no se solucione el conflicto, tal y como anunció ayer el comité de empresa de las instalaciones de AENA menorquinas.
Los representantes de los trabajadores denuncian que la dirección del Aeropuerto de Sevilla, de forma unilateral, no está cubriendo bajas y otras eventualidades desde finales de septiembre lo que, según aseguran, supone una reducción de plantilla encubierta.
CCOO, UGT y USO critican que la situación es especialmente preocupante en la sección de operaciones en la que, en ocasiones, sólo hay tres bomberos en turnos de seis y un señalero en turnos de cuatro, lo que pone en riesgo la seguridad de los usuarios del aeropuerto sevillano.