Cerrado. De puertas adentro, poco movimiento. Sólo la limpiadora que inmersa en su trabajo y ajena a todo tipo de ajetreo no hace más que abrir y cerrar palcos. De puertas afuera, un grupo de turistas de la tercera edad, con la mano en el cristal de la puerta para esquivar las sombras y captar cuanto está visible del teatro de ópera más antiguo de España.
Esta estampa se repite una y otra vez ante las puertas del Teatre Principal de Maó que, para evitar este tipo de situaciones, ha puesto grasa al engranaje de la imaginación para ofrecer nuevas actividades y usos a las dependencias del teatro.
Por un lado la búsqueda de nuevos ingresos ante la bajada del número de mecenas y por otro la apertura de puertas de un edificio que es de todos y que debe ser conocido por todos, han motivado a la gerencia del recinto para retomar las visitas guiadas. Será a partir de febrero cuando se inicien estas convocatorias que se llevarán a cabo en grupos de una veintena de personas y a un precio que oscila entre los tres y los dos euros por persona, según edad o según tipo de visita -individual o grupal. La duración de la misma será de una media hora y será dirigida por el personal del teatro.
Según explica la gerente, Virginia Victori, "las visitas que organice el Teatre tendrán lugar los miércoles -siempre que no haya alguna actuación en el coliseo- aunque nos adaptaremos a las solicitudes que nos lleguen". La ruta incluye todo el engranaje de funcionamiento de un teatro exhibiendo desde el escenario hasta los palcos pasando por los camerinos y salas anexas. "Queremos ofrecer la oportunidad de dar a conocer un teatro y cortar de raíz la idea de que sólo es apto para un público concreto", señala la gerente quien opina que los menorquines no conocen aun los interiores del mismo.
En esta línea de abrir las puertas y levantar el telón a todo tipo de iniciativas que ayuden a reactivar la actividad teatral y económica, Victori señala que las negociaciones con una compañía de cruceros está "muy avanzada" y probablemente tengan una respuesta definitiva a final de mes. Se trata de una presentación prevista para abril y dirigida a 170 agentes de viajes quienes van a ser informados sobre un nuevo crucero que tendrá a Menorca como puerto de parada y que la compañía quiere dar a conocer. El interés se centra en el patio de butacas y el bar.
salas palagi y de la reina
Por otra parte y siguiendo en esta línea de ofrecer nuevos usos al recinto teatral, los patronos han visto con buenos ojos el alquiler de algunas salas que hasta el momento "sólo han sido utilizadas en contadas ocasiones". Así, la sala Palagi, que está ubicada en la tercera planta del teatro, tiene capacidad para 80 personas y permite su uso para la presentación de libros, conferencias, jornadas o exposiciones, entre otras utilidades. La sala se puede distribuir en forma de teatro, imperial y en U. Anexo a esta sala se encuentra el bar que posibilita su utilización para 'coffee breaks' o aperitivos y cuya capacidad alcanza las 200 personas.
Además, en el primer piso y justo en frente del palco presidencial se encuentra una zona "de diálogo en los espectáculos" hasta el momento, que puede convertirse en una elegante sala. Tiene capacidad para unas 60 personas y ofrece la opción de comunicarse con el bar del tercer piso o con el de la planta baja, de menores dimensiones y capacidad para unas 80 personas. La Sala de la Reina posibilita el uso de cuatro laderas en el segundo y primer piso que dan aspecto de palco. Victori señala que "hay algunos grupos que desean utilizar el teatro pero al tratarse de un número reducido el patio de butacas les queda demasiado grande, es una buena opción para este tipo de actividades". Asimismo, recalca que la iniciativa ya está ideada, "sólo queda su difusión en hoteles, agencias de viajes o páginas web, entre otros".
Finalmente, y probablemente a partir del mes de abril, el Teatre pondrá en marcha las rutas gastronómicas teatrales, "un proyecto que empezó a construirse pero que no llegó a fructificar", señala. Se trata de una iniciativa que va a implicar a aquellos bares y restaurantes de la zona que deseen adherirse para que, ya sea antes o después de un espectáculo en el Teatre, la gente sepa que estos locales van a estar abiertos. El programa de actos que edita el Teatre incluirá una ruta con la ubicación de cada uno de estos puntos.