Los puertos de la Isla volvieron a sufrir ayer las consecuencias del mal tiempo. El buque de la naviera Baleària adelantó su salida desde Ciutadella en dirección a Alcúdia a las 12 horas, cuando estaba prevista para las seis de la tarde. A pesar de esta modificación horaria, el barco, que ya había desamarrado del dique de Son Blanc, y por fenómenos meteorológicos adversos según fuentes de la compañía, se vió obligado a volver a amarrar y cancelar la travesía a las 13 horas. Una hora después, una treintena de pasajeros, así como toda la carga del barco, fueron desembarcados a la espera de poder zarpar hacia Alcúdia cuando el temporal amaine. La compañía ha cancelado a su vez todos los servicios previstos para hoy. Fuentes de Baleària informan que los pasajeros afectados por esta cancelación han sido recolocados para otros días o se les ha devuelto el dinero del billete.
Por su parte, el barco de la naviera Iscomar zarpó ayer a Ciutadella a las 10.30 horas y regresó hacia el puerto mallorquín a las 13 horas. Para hoy, Iscomar informa que se han modificado los servicios programados. Así, el buque Nura Nova saldrá de Alcúdia a las 14 horas y zarpará de nuevo hacia Mallorca a las 20 horas. El puerto de Maó fue cerrado por fenómenos adversos desde el mediodía.
Árboles caídos
Las rachas de viento ocasionaron ayer daños especialmente destacables por su espectacularidad en Maó y Ferreries. En la calle Vassallo de Maó la rama de un pino de las inmediaciones del colegio La Salle se cayó sobre la carretera y tuvo que ser retirada por la brigada de obras municipal, mientras se desviaba el tráfico durante unos instantes. En Ferreries fueron los bomberos quienes retiraron una rama de un árbol de considerable tamaño que se había caído sobre dos coches en la plaza España.