La Conselleria balear de Salud, Familia y Bienestar centralizó ayer los datos de la incidencia de la huelga general en la sanidad, incluidos los centros de salud de Menorca y el Hospital Mateu Orfila. Mientras los sindicatos UGT y CCOO reiteraron sus quejas contra la gerencia del 'Mateu Orfila', por la retirada de folletos informativos sobre el paro, las cifras del seguimiento en los centros de salud eran desiguales.
Así, mientras en Canal Salat se registró afluencia de usuarios y la atención se ofreció con relativa normalidad, en el centro de Dalt Sant Joan usuarios informaron de la cancelación de citas para la realización de análisis, debido al seguimiento de la huelga por parte del personal de enfermería.
Aunque los servicios mínimos se cumplieron, según los sindicatos, también hubo usuarios del transporte sanitario, para acudir a servicios de rehabilitación, que se vieron obligados a acudir en taxi a sus citas. Los servicios mínimos garantizaron que en los centros de salud la atención fuera la misma que durante cualquier fin de semana.
Según los datos ofrecidos, la huelga registró un "bajo" seguimiento del 15,05 por ciento en el sector público de Balears, una cifra en la que se incluye la sanidad, la educación, el transporte, la administración y la radio y televisión públicas de las Islas.
El conseller de Presidencia, Antoni Gómez, tachó de "fracaso" la huelga general y afirmó que la respuesta a la convocatoria puso de manifiesto que "no ha tenido una consecuencia en la economía" y "lo que pretendían los sindicatos no se ha cumplido".
Los datos del Govern apuntan un seguimiento de la huelga del 29,6 por ciento en el conjunto del Archipiélago, un 16,91 en la Universitat de les Illes Balears (UIB) y de tan sólo un 7,26 por ciento en sanidad, sin que se haya tenido que anular ninguna intervención quirúrgica.