Las primeras voces en contra del avance del Plan General de Ordenación Urbana de Es Mercadal aprobado el pasado 9 de marzo han comenzado a hacerse oír. El malestar se ha desatado entre los propietarios de diversos huertos ubicados en la zona del Pla de Ses Eres, cuyos terrenos se verán afectados por la construcción del nuevo vial que discurrirá entre Biniaumaia hasta el Polígono. "No estamos en contra de la nueva normativa urbanística pero no nos parece lógico que, teniendo en cuenta la gran cantidad de pisos en venta que hay en el pueblo, se abran nuevos viales con la finalidad de construir más", indicó molesto ayer uno de los vecinos que ha presentado alegaciones al plan que, según indicó, contempla la expropiación de diez metros cuadrados de su parcela, de 70 metros.
A pesar de que el alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller, cifra en quince los huertos afectados, este vecino denuncia que el primer edil no tiene en cuenta aquellas zonas de siembra que se encuentran detrás de algunas viviendas de la calle Tramuntana, como es su caso. De este modo, afirma que el número de terrenos perjudicados asciende a 26. RECALIFICACIÓNAmetller comprende el malestar de los propietarios aunque remarcó que la recalificación de los terrenos incrementará el valor de los terrenos. Los huertos se encuentran a día de hoy en una zona rústica, de modo que su coste de venta varía entre los 4 y los 10 euros por metro cuadrado. En el momento en que se conviertan en parcelas ubicadas en suelo urbano su valor puede alcanzar los 1.500 metros por metro cuadrado, destacó el alcalde, quien no obstante confirmó que según la Ley 2/2012 los dueños deberán destinar unas dos terceras partes de suelo a usos dotacionales o de infraestructuras, así como a aprovechamiento municipal.
El primer edil reconoció las molestias que puede ocasionar a algunos vecinos la nueva normativa aunque quiso subrayar que el Plan General de Ordenación Urbana pretende dar respuesta al interés general y no a inquietudes particulares . "Intentamos perjudicar los menos posible a los ciudadanos pero hay que entender que estos huertos se encuentran en una área de crecimiento muy cercana al núcleo urbano". En esta línea, Ametller matizó que las decisiones relacionadas con el nuevo plan no responden a criterios políticos sino a argumentos urbanísticos. "Los técnicos no miran quien son los propietarios de los terrenos afectados sino que plantean las mejores opciones según los costes de urbanización", concluyó.