Las obras del Teatre des Born avanzan al ritmo previsto gracias a que no han quedado paralizadas durante la temporada turística. La última semana ha sido especialmente decisiva para el proyecto, puesto que ha quedado instalada la estructura metálica que soportará la cubierta del edificio. Una instalación que ha requerido ampliar la zona de ocupación de la plaça des Born por las obras para poder instalar la estructura superior con la presencia de grúas.
Así lo explica el director de la obra, José María Forteza Oliver, quien agradece la comprensión de los vecinos y comerciantes y las facilidades del Ayuntamiento de Ciutadella para que la obra pueda avanzar. El arquitecto anuncia que este mes se empezará a tapar la cubierta, con la instalación del tejado, con impermeabilización y aislamiento acústico; con la previsión de dejar el edificio tapado de aguas a finales de octubre, "si el tiempo lo permite". Mientras las obras avanzan, financiadas por el Ministerio de Fomento, el Ayuntamiento de Ciutadella tiene otro quebradero de cabeza. Se trata de conseguir el dinero necesario para que una vez terminada la reforma del Teatre des Born, el auditorio pueda disponer del equipamiento escénico. Es una inversión no contemplada en los 3,3 millones de euros por los que el Ministerio de Fomento adjudicó la reforma a la empresa Constructora San José. El Ayuntamiento ha calculado en unos 800.000 euros, más IVA, el presupuesto necesario para el equipamiento escénico del Teatre des Born. El alcalde, José María de Sintas, y la concejal de Cultura, Auxiliadora Pons, están estudiando posibles soluciones para disponer de la financiación necesaria, que si no se consigue, dejaría sin poder inaugurarse el Teatre des Born como el auditorio proyectado para espectáculos musicales y escénicos de calidad. El equipo de gobierno quiere llamar a la puerta del Gobierno central para encontrar el dinero necesario que permita completar la reforma del teatro. Según fuentes municipales, lo ideal sería encontrar financiación antes del final de la reforma para aprovechar la presencia de los técnicos y la constructora con el fin de instalar el equipamiento escénico. No obstante, según apuntan dichas fuentes, encontrar el dinero preciso en un momento de dificultad económica como el actual se antoja más complicado que nunca. Lo único que tiene el Consistorio es tiempo para conseguir el dinero hasta que no termine la reforma.
De momento, ninguna instancia quiere comprometerse a poner fecha al final de las obras de rehabilitación del edificio, aunque si se cumple el plazo de 20 meses de ejecución, la reforma podría quedar terminada a finales del año que viene. El arquitecto asegura que durante los meses de julio y agosto se ha aprovechado para dar un importante empujón al proyecto y se ha empezado a ejecutar el tabicado interior. "Lo importante es no parar y cumplir con los plazos", afirma el arquitecto, quien añade que pese a la coyuntura económica el Ministerio de Fomento no ha dado marcha atrás a un proyecto cuyo coste fue presupuestado para este año y el que viene.