Autoficha
Me llamo Rosa Nonides Alonso, tengo 43 años, y nací en Oviedo (Asturias). Estoy casada, tengo una hija, y vivo en Cala Tirant. Llegué a Menorca hace trece años y desde el primer momento supe que quería quedarme aquí. Me encantan los animales, y algunas de mis aficiones son el cine, la literatura y la música.
¿Por qué motivo decidió venir a vivir a Menorca?
Fue por trabajo, porque mi primer marido consiguió un empleo en la Isla. Yo no sabía nada de Menorca, solo había visto alguna fotografía en internet. Pero la primera impresión fue increíble. Recuerdo entrar al puerto de Mahón en barco una mañana de primeros de junio. Aquella vista y la luz me llevaron a pensar que aquí era donde quería vivir. Y la verdad es que me adapté muy bien, porque en aquella época había trabajo, y conseguimos vivienda rápidamente.
¿Cómo ha sido su trayectoria laboral desde que llegó?
Comencé de camarera pero posteriormente pasé a la rama sanitaria, que realmente es en lo que me formé. De hecho, fui la primera auxiliar del centro de enfermos de alzheimer en Maó. También trabajé en clínica privada y en el Hospital Mateu Orfila. Hasta hace nueve meses que, con el tema de los recortes, han prescindido de buena parte de los eventuales, así que estoy en el paro.
¿En qué consistía su trabajo en el centro de enfermos de alzheimer?
Era un trabajo duro pero gratificante. Me ocupaba de la estimulación cognitiva de los enfermos, que para ellos era como ir al colegio. Hacíamos juegos de memoria, motricidad... Sobre todo conseguir que se sintieran válidos y que no perdieran sus recuerdos. Allí estuve cerca de un año pero lo dejé para recuperar el negocio familiar.
Comenta que le encantan los animales y, de hecho, forma parte de una asociación...
Si, estoy en la junta de la protectora de Maó y colaboro con la agrupación desde hace casi un año. Todo comenzó cuando me enteré de que unos vecinos maltrataban a su perro. Llamé a la asociación y la respuesta fue tan rápida y buena que quise entrar como voluntaria. Empecé ayudando en mi tiempo libre pero finalmente entré en la junta. A veces es complicado y paso mucho tiempo indignada con cuestiones que no funcionan, pero para mí es muy importante cuando solucionas alguna cosa, es decir, salvar a algún animal o mejorar sus condiciones de vida.
¿Cuáles son sus planes de futuro?
Quiero seguir disfrutando de la naturaleza de esta Isla. Espero que nunca se llegue a estropear, ni que le afecte toda esta crisis en la que vivimos. Y también quisiera que la protectora encontrara un terreno en el que poder habilitar un refugio, para que así muchos animales no lleguen a la perrera.