El fiscal Pedro Horrach participó el 13 de agosto en las Tertúlies a la Fresca de Es Mercadal y dejó claro que el Caso Nerer no estaba olvidado. Ahora se confirma. La Fiscalía Anticorrupción parece haber reactivado la investigación, cuatro años después de que el Ayuntamiento le remitiera las conclusiones de la comisión de investigación. Según varias fuentes consultadas, en las últimas semanas se han dado algunos pasos que indican que la Fiscalía va a sacar a la luz el caso de la compra del edificio Saura Morell de Ciutadella por parte del gobierno municipal del PP, cuando Avel·lí Casasnovas, que está en el centro de la investigación, era concejal de Urbanismo.
El asunto parecía dormido por parte de una Fiscalía desbordada por el caso Palma Arena y las piezas separadas del mismo y el que afecta a Urdangarin. De hecho la primera noticia sobre Nerer desde septiembre de 2008 la dio Pedro Horrach en Es Mercadal.
El informe de la comisión de investigación ha resultado determinante para decidir a la Fiscalía a poner en marcha la maquinaria que ha destapado los casos más importantes de corrupción política en Balears. A pesar de las pruebas de posible malversación de fondos públicos, la comisión no pudo llevar a cabo algunas actuaciones que ahora puede completar la Fiscalía.
La investigación se refiere a dos cuestiones principales, la forma en que se gestó la compra del edifico Saura Morell por parte del Ayuntamiento a Nerer Inmobiliaria SL y la valoración de las permutas que se llevaron a cabo. La hipótesis de la comisión de investigación y, por tanto, de la Fiscalía es que Nerer compró a la inmobiliaria de la Caixa el edificio con la idea de venderlo al Ayuntamiento. La operación dejó un beneficio de 939.386 euros. La segunda hipótesis es que la parcela del paseo marítimo, conocida por "la joya de la corona" se cedió en permuta con una valoración inferior a su precio real, perjudicando así a la economía municipal.
Las prisas de Avel·li Casasnovas para que el acuerdo fuera aprobado por el pleno y la coincidencia de esta operación con las permutas por la adquisición de los terrenos de S'Hort d'en Llinyà, en el Canal Salat, son elementos que hacen pensar en que se urdió una estrategia para conseguir un beneficio seguramente ilícito, aprovechando la mayoría de gobierno del PP en el Ayuntamiento. Las conclusiones de la comisión de investigación indican que la valoración de las parcelas municipales que se cedieron para la compra de la zona del Canal Salat era inferior a la real, beneficiando así intereses particulares.
Uno de los datos más significativos es que el palacio Saura Morell fue propiedad de Nerer solo unos minutos.