Un vuelo de la compañía Vueling con destino a Barcelona vio ayer retrasada su salida unas tres horas y media. El motivo de la demora aducido por fuentes de AENA fue "problemas meteorológicos en destino", en concreto la densa niebla en el Aeropuerto de El Prat.
El avión de Vueling debía salir a las 18.10 horas pero acabó despegando a las 21.44 horas, con el consiguiente enfado de los pasajeros, más aún en aquellos casos en que debían enlazar con otros trayectos.
Cabe recordar que ayer era un día previo a un habitual periodo de vacaciones para muchas personas.
Por consiguiente, también se demoró en la misma medida el Barcelona-Menorca inmediatamente posterior. Uno de los pasajeros que esperaba en la Ciudad Condal para venir a la Isla dudaba de la versión oficial, "aquí se ven perfectamente las estrellas", y se quejó por la poca información recibida desde la compañía.