Tras tres años de parálisis, el Consorcio del Acantilado del puerto de Maó ha reanudado su actividad con el fin de reactivar el ente y proponer actuaciones concretas en el cantil que ayuden a consolidarlo.
Las tres administraciones que forman parte del organismo Ayuntamiento de Maó, Consell y Govern- se reunieron ayer para establecer las directrices del Consorcio y reiniciar la actividad inversora. De las dos reuniones celebradas de forma consecutiva se extrae que la gran prioridad del Consorcio es la consolidación de la Costa de Ses Voltes y, en la medida que el presupuesto lo permita, y la mejora de las conexiones.
La alcaldesa de Maó, Águeda Reynés, señala que la situación económica del ente es "delicada" puesto que las aportaciones de cada administración no estaban al día. "Ni Consell ni Govern ingresaba las cuantías fijadas", advierte. Es a partir de este momento cuando el Consorcio actualizará sus cuentas para poder resucitar las actuaciones en una zona que es "la entrada más importante a la ciudad", resalta.
La situación ha dado un giro con la renovación del compromiso financiero por parte del Ejecutivo autonómico que aprobó una aportación plurianual de 240.000 euros al año hasta 2014 (en total asciende a casi dos millones de euros) para hacer frente a la deuda acumulada por este organismo. Reynés apunta asimismo que el pasivo no financiero actual asciende a 271.000 euros, de los que 265.000 euros corresponden al período anterior al mandato del PP.
Sin trabajadores
La alcaldesa explica en este sentido que tras revisar las cuentas de la actividad desarrollada por el ente, los tres organismos han constatado la inexistencia de auditorías durante el período comprendido entre 2007 y 2011. Es por ello que "poner al día el Consorcio que hasta ahora estaba paralizado" es prioritario "no solo para abordar acciones de urgencia sino como prevención", puntualiza.
Esta delicada situación a la que se ha visto abocado el organismo ha derivado en la amortización del único puesto de trabajo que contemplaba. Así es como "a día de hoy el Consorcio del Acantilado no tiene personal porque su situación económica no lo permite", explica Reynés. Y es que, según recuerda la alcaldesa, la falta de liquidez obligó incluso al Ayuntamiento a poner a la trabajadora en comisión de servicio en el Consistorio.
En las reuniones de la Comisión Ejecutiva y la Junta Rectora celebradas ayer se analizó el Plan Director y las propuestas de actuación que abordan los técnicos redactores del mismo. Así, la gran prioridad de cara a este ejercicio va a ser la consolidación del acantilado de la Costa de ses Voltes así como sus conexiones "en la medida de lo posible".
Reynés indica que la zona ha requerido actuaciones urgentes y provisionales de protección para evitar daños colaterales a los desprendimientos, por lo que el proyecto de consolidación es clave al tratarse de la principal zona de unión entre la rada y la ciudad.
A esta primera actuación, Reynés añade que se tienen en cuenta la Costa des Muret y la Costa de Ses Piques donde es "necesaria su actuación urgente para evitar derrumbes". E incorpora como pilar para la reactivación económica de Maó la mejora de las conexiones entre la rada y la ciudad. No obstante, Reynés es reacia a facilitar plazos para abordar estas mejoras en el acantilado.
Los proyectos siguen las indicaciones del Plan Director. La alcaldesa señala que hasta hace un año ni Consell ni Govern conocían el contenido del mismo porque "el documento sin desembalar permaneció en el suelo de las dependencias municipales durante tres años". En un próximo encuentro, previsto para febrero, se decidirá la aportación que debe realizar cada administración que forma parte del Consorcio y se aprobará la inversión.
Por otra parte y en lo que se refiere a temas internos del ente, el Consorcio deja de formar parte de la Conselleria balear de Turismo para pasar a la de Administraciones Públicas. Con este cambio, ayer se dio cuenta de los nuevos nombramientos.
El conseller Simón Gornés preside así la Junta Rectora del organismo. Por otra parte, cabe indicar que desde el 1 de enero la gran mayoría de consorcio de esta naturaleza se han unificado en el Consorcio balear de infraestructuras. No obstante, el ente del acantilado de Maó es uno de los pocos que ha quedado excluido al ser considerado estratégico para Maó.