Autoficha
Me llamo Lorena Allés Thomas. Tengo 12 años y nací en Maó. Actualmente estoy en primer curso de la ESO en el Instituto Pasqual Calbó. Me gusta jugar al fútbol practicar el trial, además de jugar con mi hermano, que tiene casi tres años, y salir con mis amigos. Todavía no tengo muy claro lo que me gustaría hacer cuando sea mayor. El mundo del deporte me encanta y creo que voy a decantarme por algo relacionado con la actividad física.
¿De dónde viene tu afición por el trial?
Estas aficiones son una influencia de mi padre. Empecé el trial a los 5 años cuando él me compró una moto. Al principio, iba a casa de mi abuela con la moto, que llevaba dos pequeñas ruedas de bici incorporadas. Vi que me gustaba de verdad..
¿Y el fútbol?
Me gustaba ir con mi padre a ver los partidos del Sporting y a los 7 años quise intentarlo. Me apunté al equipo de fútbol sala del club, pero no me convenció y quise probar el baloncesto. Finalmente descubrí que prefería jugar con los pies, volví al fútbol y ahora estoy muy contenta.
¿Estuvo de acuerdo tu familia con tu afición por estos deportes?
(Mira a su madre de reojo y sonríe). Mi madre me decía que eran deportes peligrosos. En el fútbol porque podían darme un pelotazo en la cara y además hay mucho contacto físico. En trial, en cambio, podía caer y romperme una pierna. En cambio, mi padre ya practica el trial y al final la convenció.
El fútbol y el trial son deportes que normalmente se asocian con los chicos. ¿Representó un obstáculo? ¿Estás contenta con tus compañeros?
Ningún obstáculo. Mis amigos están encantados y siempre me han apoyado. En trial, que es un deporte individual, no hay problemas y en fútbol tampoco. Alguna vez oyes el comentario, "mira, es una niña". De hecho somos dos. En el equipo también juega Judith Bonet. Un problema es cuando vamos a jugar fuera de casa y no hay vestuario para chicas. A veces esperamos nuestro turno o nos dejan otro vestuario. Lo peor que puede pasar es que volvamos a casa sin ducharnos.
Con tan solo 13 años, en la categoría iniciación de trial, conseguiste un tercer puesto. ¿Que supuso para ti?
Unos amigos mallorquines nos animaron a competir allí. Partíamos los viernes por la noche y llegábamos a Alcúdia a las 23 horas. El sábado nos levantábamos muy pronto para ir a la Escuela de Trial de Son Moix y por la tare recorríamos las zonas del circuito. A las 7 de la mañana de los domingo nos levantábamos para ir a competir. De la competición, al barco, corriendo a veces sin tiempo para ducharnos. El día que gané el tercer puesto fue muy emocionante. Era la única chica y la lucha con un chico por este puesto fue muy reñida. Al principio sentí una gran euforia. Ahora lo tengo más asimilado
¿Si tuvieras que elegir, con qué deporte te quedarías?.
Me gustan los dos por igual. Si coincidieran el mismo día, a la misma hora, creo que me decantaría por el trial.
Habrás vivido muchas anécdotas.
Valoro mucho la gente que he conocido de fuera de la Isla. Recuerdo lo que sucedió una vez , un día con una tormenta enorme. Tenía que subir a una zona muy resbaladiza, iba con dos detrás, no paraba de llover, estaba llena de barro. Ese día tuve que cambiar la moto porque la mía se estropeó. Al ir al barco, resultó que no salía por causa del temporal. Al final, tuve que vestirme con ropa de mi padre, porque no teníamos nada a mano. Fue un día para recordar.