El Ayuntamiento de Maó realizará durante los próximos días una campaña dirigida a incrementar la sensibilización sobre la limpieza de los espacios públicos de la ciudad, en particular las aceras, calzadas y zonas ajardinadas.
Por ese motivo, los agentes de la Policía Local que realizan patrullas urbanas harán cumplir especialmente el artículo 14 de la ordenanza de tenencia de animales, que prohíbe dejar deposiciones fecales de perros, gatos y otros animales en las vías públicas y privadas.
Esta misma ordenanza advierte de la consideración de infracción leve dar comida a los animales en la vía pública y espacios públicos por personas o fuera de los espacios específicamente autorizados y habilitados con este fin o que los perros circulen por la vía pública sin correa o collar.
La campaña municipal pretende sensibilizar a los dueños de animales de la mala imagen que la suciedad que éstos provocan causa a la ciudad y las molestias que han de padecer los ciudadanos por el comportamiento incívico.
En esta línea, fuentes municipales han informado este jueves de que la tercera parte de las quejas que se reciben a través de la web municipal están relacionadas con este problema.
Por ello, tras una primera fase de información para el cumplimiento de la citada ordenanza, los agentes aplicarán con rigor el régimen sancionador previsto en esa misma ordenanza, que establece multas de 60 a 300,51 euros para las infracciones leves y de 300,51 a 1.502,23 euros para las graves.