Apenas han transcurrido dos semanas desde la huelga general en la educación contra la 'ley Wert' y los nervios en los claustros de profesores no cesan, esta vez por la aplicación del decreto del Tratamiento Integral de Lenguas (TIL) del Govern, y el escaso margen de tiempo para elaborar los proyectos mediante los cuales cada centro tiene que aplicar la normativa balear que contempla la enseñanza en catalán, castellano y una lengua extranjera, preferentemente inglés.
El decreto se puede aplicar siguiendo el modelo 33-33-33, dedicando ese porcentaje a la enseñanza en cada una de las lenguas, o con la elaboración de un proyecto por cada centro, vía esta última recogida en el artículo 20 de la norma y que ha sido elegida de forma mayoritaria por los colegios e institutos menorquines, aunque, tal y como reconoció ayer el delegado territorial de Educación, Julián Hernández, "ha generado muchas dudas y numerosas consultas".
El plazo para la elaboración de dicho proyecto, que debe pasar por consejo escolar y recoger las aportaciones de las familias -aunque esta última consulta no es vinculante-, finalizará el día 20 de junio. Los equipos de docentes trabajan estos días a destajo para definir cómo aplicarán el decreto TIL, sin renunciar a sus proyectos educativos, a la vez que inician el periodo de calificaciones y exámenes de fin de curso.
Todo ello sin que de momento conozcan los recursos con los que contarán, aunque el delegado de Educación afirmó ayer que "cuando se aprueben las cuotas de asignación de profesores se adjudicarán más de inglés a los centros". No obstante, Hernández admitió que el proceso es "complejo" y que el profesorado en la Isla que cuenta con la titulación B2 requerida para impartir las clases en inglés es insuficiente.
La delegación "ha sido flexible en las fechas", aseguró, porque desde que se anunció que el Govern aprobaría el decreto, en una reunión entre responsables de Educación y directores de centros celebrada el pasado 10 de abril, y la remisión de las instrucciones para la aplicación de la norma por parte del Ejecutivo, el 10 de mayo, transcurrió un mes que "se ha perdido", manifestó Hernández.
Asimismo, a raíz de las consultas planteadas por parte de los centros, los servicios jurídicos de la Comunidad Autónoma han elaborado un informe sobre el artículo 20 del decreto, el que permite la elaboración de un proyecto específico a cada centro. Dicho informe señala que el cambio a un proyecto de centro debe ser argumentado y que "no se debe identificar distribución horaria con cómputo horario". El mínimo de horas a cumplir en inglés es de 4 horas en 1º y 2º ciclo de Educación Primaria, y de 5 horas en el tercer ciclo. En Enseñanza Secundaria serán las horas elegidas para la materia que se da en inglés mas el 20 por ciento de la carga lectiva del resto de materias; en Bachillerato, las horas correspondientes a la materia no lingüística elegida del curriculum, y en FP, las horas correspondientes al módulo elegido para impartir en inglés.