El Ateneu de Maó se encontraba en situación crítica hace un año, debido a la falta de recursos económicos. Hoy ha superado ese estado. La junta presidida por Margarita Orfila cumple un año de gestión., con un balance positivo. A pesar de la reducción de las ayudas -el Ministerio de Cultura ha eliminado la subvención- el Ateneu ha ampliado el programa de actividades.
Para afrontar los problemas económicos se han optimizado los recursos, según ha explicado la presidenta. Se ha reducido el coste de personal y la sede se abre solo por las tardes, cuando se concentran todas las actividades. Por otra parte el Consell ha incrementado la ayuda económica, porque va asociada al número de actividades, que ha crecido; el Ayuntamiento de Maó sigue colaborando, aunque la forma ha cambiado; y la obra social de la Caixa, con la aportación de 18.000 euros representa un apoyo fundamental. El cine club también aporta recursos. Además se ha impulsado la Fundació Ateneu y las gestiones de mecenazgo. A todo ello se añade el esfuerzo de los miembros de la junta para poner en marcha iniciativas interesantes sin coste económico.
Mañana se celebra la asamblea general de socios, a quienes se pedirá que mantengan su apoyo a la entidad. No se van a incrementar las cuotas. La básica es de 9 euros. El anterior presidente, José Antonio Fayas, creó la cuota de socio colaborador, que permite aportaciones superiores, que en algún caso alcanzan los 50 euros. El Ateneu cuenta en este momento con más de seiscientos asociados, lo que significa que uno de cada 40 residentes en Maó tiene carné de la entidad.