El pasado invierno, un temporal afectó a uno de los pantalanes de Cala en Busquets, en el puerto de Ciutadella. Concretamente, la instalación perjudicada fue la del centro, puesto que los otros elementos ya habían sido renovados con anterioridad. Ante esta incidencia, el gestor de los pantalanes, el Club Nàutic de Ciutadella, quiere reparar la instalación afectada.
Con esta intención, el presidente de la entidad, Bartolomé Carrasco, se desplazará la próxima semana hasta Palma para reunirse con los responsables de Ports de les Illes Balears para pedir el permiso oficial para mejorar la instalación. Cabe recordar que formalmente, es Ports el titular de los pantalanes, y tiene cedida su explotación de manera temporal al Club Nàutic. Por ello, antes de ejecutar cualquier intervención en los pantalanes, la entidad ciutadellenca necesita el permiso de Ports de les Illes Balears.
Evidentemente, un proyecto de este tipo requiere una inversión económica que el Nàutic quiere amortizar de algún modo, y más después de acometer otras actuaciones en los otros pantalanes de la zona. Por eso, el presidente de la entidad propondrá a Ports de les Illes Balears poder prorrogar la actual concesión por tres años más. El acuerdo actual expira el próximo año, según informa Carrasco, y la intención es que a partir de esa fecha la entidad pueda disponer de tres años más para seguir explotando los 90 amarres de la dársena, 75 de ellos de base y el resto de tránsito.
De hecho, la entidad gestiona Cala en Busquets desde el 22 de junio de 2007, y desde entonces ha ido renovando y prorrogando esta concesión a cambio del pago de un canon al Govern balear.