Las caras más representativas del PSM en la democracia se dieron cita ayer en Ciutadella para protestar contra la política educativa del Govern balear. Frente a la Casa de Cultura de Ciutadella, 18 cargos históricos y actuales se dieron cita "para plantar cara a las amenazas y ataques del PP a la comunidad educativa de Menorca y de Balears".
El lugar escogido por el PSM para esta concentración no es casual. Los menorquinistas explican que la Casa de Cultura de Ciutadella "es símbolo de la importancia que tienen la cultura y la educación para el progreso social. Además, en el año 1904 fue la escuela de Sa Plaça, donde el pedagogo Joan Benejam impartió clases con un modelo aún vigente, que concebía la educación como una herramienta de progreso, de justicia y de libertad. Era un modelo que debía tener espacios para el diálogo y el debate, y que debía enseñar a pensar a las personas, aspectos que tanto miedo generan en el PP".
Además, escogiendo la Casa de Cultura el PSM evitaba fotografiarse delante de algún centro educativo concreto "para que por parte del PP no se relacionara el colegio con el partido". Según la coordinadora del PSM, Maite Salord, "se trata de autocensura, la peor de todas porque nace del miedo, y es que tenemos miedo de las represalias porque hoy los enseñantes padecen por parte del PP una persecución política, una caza de brujas, purgas contra los disidentes más propias de una dictadura que no de una democracia". Frente a esta actitud, Salord sentenció que "no permitiremos que nos recorten una democracia que nos ha costado mucho conseguir".
El PSM criticó con dureza a la consellera de Educación del Govern balear, la menorquina Juana Maria Camps. Así, el diputado autonómico Manel Martí calificó como "irresponsable, inconsciente e incompetente" la actuación de Camps. "Dirigir la escuela sin el aval de los profesionales y los expertos es una gran irresponsabilidad", explicó.
Sobre los directores de instituto expedientados, Martí reiteró que "es una decisión que va contra la autonomía de los centros, de las competencias de los consejos escolares y en contra de la participación de la comunidad escolar en la vida de las escuelas. Los directores son la excusa que la consellera ha utilizado para no culpabilizar y perseguir a los padres y madres que son parte de los consejos escolares y persuadir así a los profesores que cuestionan la viabilidad y la bondad del TIL".