Mañana viernes los dos empresarios que promueven la creación de una aerolínea menorquina expondrán su iniciativa en el Cercle Artístic de Ciutadella a partir de las 20 horas. Un proyecto cuyo éxito depende, según Mariano Bendito y Llorenç Moll, de la aportación de dinero por parte de las administraciones públicas. Desde el Consell ya han anunciado que no disponen de liquidez para participar en el proyecto, del que requieren garantías de viabilidad.
Por eso, el conseller de Movilidad, Luís Alejandre, quiere tener la certeza de que cualquier propuesta de compañía aérea tenga la viabilidad garantizada. En este sentido, pretende que se redacte un estudio económico completo para determinar si la propuesta de Bendito y Moll, o incluso otras que se han presentado con anterioridad, pueden materializarse.
Así, Alejandre está buscando la fórmula para financiar la redacción de este estudio de viabilidad. Lo hace, asegura, en un momento en el que el Consell no disponde de presupuesto «porque estamos pagando lo de Cesgarden» ni tampoco competencias sobre esta materia.En este sentido, la colaboración con elGovern balear y la Dirección General de Aeropuertos se antoja determinante a la hora de poder afrontar esta iniciativa.
Fusionar dos propuestas
Luís Alejandre asegura que su intención es impulsar la iniciativa de la aerolínea insular, pero apunta la posibilidad de modificar el proyecto propuesto por Mariano Bendito y Llorenç Moll incorporando aportaciones de una propuesta anterior, la que realizó en el año 2006 Manuel Orfila. Este piloto apostaba también por la participación de la sociedad civil menorquina para la creación de la aerolínea, aunque en su caso no hablaba de aportación de capital público.
Su propuesta se basaba en la implicación de 80 empresarios menorquines, cada uno de los cuales debería desembolsar 30.000 euros para conseguir un capital inicial de 2,5 millones de euros. Este dinero serviría para formar la empresa, pero no incluía la compra mediante 'leasing' de los dos aviones que planteaba para su iniciativa. Incluyendo este coste, y el mantenimiento, el dinero necesario para un año de funcionamiento rondaba los diez millones de euros, prácticamente el mismo capital que requiere la propuesta de Bendito y Moll.
Precisamente Orfila participará mañana en la presentación en Ciutadella de la propuesta de aerolínea.