El Ayuntamiento de Maó puede salir perjudicado de la exigencia del Gobierno central al Consell para que la devuelva 2,2 millones de euros correspondientes al Fondo para la Modernización de Infraestructuras Turísticas (FOMIT). Este dinero debía servir para que el Consistorio pagara las obras que en su día se realizaron en la zona deportiva de Bintaufa, una actuación que se realizó después de que el anterior equipo de gobierno municipal decidiera que éste sería el proyecto que se cubriría con los fondos del FOMIT y no el que inicialmente se había presentado, la construcción de un club hípico en Sant Lluís.
Ahora, Madrid ha dicho que este cambio no estaba autorizado, y reclama que se devuelva el dinero que se gastó donde no estaba acordado. El Ayuntamiento de Maó teme que esta situación le deje sin cobrar las obras que él pagó, y por eso reclama al Consell 1,2 millones de euros en este sentido. Los servicios técnicos del Consistorio ya están preparando la reclamación al Consell, y la alcaldesa de Maó, Àgueda Reynés, y el presidente del Consell, Santiago Tadeo, ya ha tratado esta cuestión en una reunión.
Àgueda Reynés apunta que «no puedo aceptar que el dinero fuera gastado por el anterior equipo de gobierno en gasto corriente, y que ahora sea el Ayuntamiento de Maó el perjudicado por la inversión del FOMIT».