La primera previsión del ayuntamiento de Maó era que la ampliación del aparcamiento de la Sínia des Cuc para ganar cerca de 200 plazas estuviese lista en julio de 2013, pero los trabajos siguen en marcha y no está previsto que concluyan definitivamente hasta antes del próximo verano. Las obras debían durar entre un mes y medio y dos meses, una intervención rápida para hacer crecer una de las principales bolsas de aparcamiento del centro de la ciudad que, sin embargo, por el momento, ya acumulan nueve meses.
El concejal de Servicios Técnicos, Mateu Aínsa, reconocía ayer el retraso «importante» en los trabajos y argüía que «estamos teniendo problemas con las tareas para apisonar la zona». El 'popular' explicó que la empresa M.Polo, adjudicataria de la ejecución de la obra, se ha visto obligada a desarrollarlas «más poco a poco», principalmente por el hecho de que las casas ubicadas en este espacio «están sobre cimientos muy antiguos» que sufren cuando pasa la máquina que compacta la tierra.
Los problemas surgidos se suman a los que ya obligaron a detener los trabajos en el mes de julio del año pasado. Entonces las obras se estaban dilatando en exceso. El proyecto tuvo que ser modificado sustancialmente (se descartó la idea de hacerlo a dos niveles) tras haberse iniciado unos trabajos que el consistorio calificó de previos y entrar en un nuevo periodo de exposición pública. De nuevo estaba previsto que se reanudaran en septiembre, tras las fiestas de la Mare de Déu de Gràcia, y, sin embargo, de nuevo las máquinas no empezaron a trabajar hasta principios de noviembre.
El último plazo
Aínsa explicó ayer que el consistorio no «tiene prisa» y que tienen la intención de que los coches puedan empezar a acceder al recinto a finales del mes de marzo. Lo harán, no obstante, en condiciones de provisionalidad: «Asfaltaremos solo los accesos al parking y esperaremos a que se asienten», pendientes de cómo responden las estructuras contiguas y el firme. El resto de este espacio quedará sin asfaltar.
No sería hasta antes del verano cuando la empresa adjudicataria repartirá una capa sencilla de asfalto sobre todo el área para dar por concluidas definitivamente unas obras de ampliación que se están convirtiendo en la historia de nunca acabar.