En una sociedad en la que reina el concepto «usar y tirar», el reciclaje se postula no solo como ejemplo de sostenibilidad, sino también como vía de creación artística. Así lo defiende Laura Marte, una mallorquina afincada desde hace años en la Isla que apuesta por «ver las posibilidades creativas de los objetos para que cobren una nueva vida». Usuaria habitual de las tiendas Mestral de Caritas, colabora ahora con dicha entidad para la recuperación y reutilización del material excedente que tienen en sus almacenes. Marte, quien se define como una artista visual, sostiene que el proyecto que tienen entre manos va más allá de la simple restauración, la idea es crear.
Confiesa que siempre se ha sentido atraída por el mundo del reciclaje, una materia sobre la que realizó un proyecto hace años en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de México. Sus creaciones, algunas de las cuales se pudieron contemplar la semana pasada en la Feria del Medio Ambiente de Maó, son la semilla de un proyecto que confía pueda crecer en el futuro con la incorporación de otros artistas que residen en Menorca. Se trata de una fórmula que triunfa en muchos otros lugares, como la plataforma Basurama, según explica, un proyecto que estudia la basura en todos sus formatos y las posibilidades que ofrece en un buen número de países.