Los delitos contra la salud pública y los delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico son los motivos de encarcelamiento de un 70 por ciento de los internos en el Centro Penitenciario Menorca. Es decir, la mayor parte de los presidiarios que cumplen condena en la instalación de la carretera de Sant Lluís están relacionados sobre todo con el tráfico de drogas, además de con los robos, los hurtos y las estafas, actividades que a menudo tienen cierto vínculo.
A día 19 de septiembre había en la cárcel de Menorca 72 internos, de los cuales 27 han sido condenados por delitos contra el patrimonio y 24 por delitos contra la salud pública. Son datos oficiales del Gobierno central que fueron solicitados por la senadora por Menorca, Juana Francis Pons Vila, quien desde el primer momento ha mostrado un constante interés por todo lo que afecta al centro penitenciario inaugurado en agosto de 2010.
La tercera causa más común en la prisión de Menorca son los delitos contra la libertad sexual, con doce condenados, lo que supone un 16,7 por ciento de los internos. El resto de tipologías de delitos son mucho más residuales. Tres presidiarios han cometido delitos o faltas relacionadas con la violencia de género, mientras que el resto de tipos de delitos han sido cometidos por un solo preso, como es el caso, por ejemplo, del homicidio.
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